Una biblioteca con libros que hablan
La biblioteca provincial y de Andalucía facilita el acceso a sus libros y ordenadores mediante la adaptación de un equipo lector que permite ampliar los caracteres o convertir los textos en información de voz
La biblioteca provincial y de Andalucía ha dado un nuevo paso para eliminar las barreras que obstaculizan el acceso de los invidentes a la cultura. El proyecto de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía y la ONCE incorpora una serie de adaptaciones tiflotécnicas: el conjunto de procedimientos y complementos tecnológicos destinados a facilitar el acceso a la información y la comunicación.
Hasta ahora, las personas ciegas o con problemas visuales que acudían a la biblioteca sólo podían limitarse a palpar los libros y el teclado del ordenador sin obtener los inmensos recursos que ofrecen. Ahora, un equipo lector hará las veces de narrador, pasando el contenido de los textos a voz.
Se trata de un sistema que lee documentos en tinta con síntesis de voz. Está basado en un escáner y un programa de reconocimiento de caracteres y voz. Su nombre es POET y es de fácil uso y gran precisión.
De mucha utilidad será la lupa televisión para los que cuenten con deficiencias visuales, una cámara de vídeo con zoom que envía la imagen a una pantalla en la que el usuario lee los textos ampliados según su necesidad. Este aparato posibilita cambiar la imagen de positivo a negativo, sustituir un color por otro, mejorar electrónicamente la definición de la imagen o tutor de lectura. El equipo utilizado es TV Magnilink X Reader con pantalla de 19 pulgadas.
"Con estas ayudas se consigue que una persona pueda acceder a la información de una manera independiente y autónoma", afirmó Pedro Benzal, delegado de Cultura de la Junta. Destacó el esfuerzo realizado para que cualquier ciudadano tenga acceso a la cultura, objetivo que calificó como prioritario para la Consejería: "Lo demuestra el trabajo que se realiza en el día a día en ámbitos como el teatro, música o artes plásticas". La inversión en estos equipos asciende a 18.000 euros, dijo el delegado.
Estos avances hacia la autonomía de los invidentes y deficientes visuales no se queda en los libros, sino que abre una puerta al mundo de la informática e internet. La adaptación de los ordenadores se ha llevado a cabo a través de los exploradores de pantalla Jaws, un programa que permite trabajar con las distintas versiones de Windows y convierte la respuesta en voz o braille.
Este software es el que se instala en el 100% de las adaptaciones en nuestro país y ofrece un buen acceso a casi todos los programas importantes del mercado, y por supuesto, a internet. Permite programarlo para nuevas aplicaciones y continuamente está actualizándose.
La respuesta en forma de lo que aparece en la pantalla se realiza en voz o braille mediante una síntesis que se puede instalar en diferentes idiomas y fabricantes. La línea braille en relieve Alva Satellite de 70 caracteres posibilita que la información se lea a través del tacto.
Para los deficientes visuales se han instalado los programas de ampliación con síntesis de voz incorporada. Zoomtext 9.1 amplía lo presentado en pantalla y permite cambiar contrastes, colores y otros parámetros
Así, los ciegos podrán realizar todas las acciones que internet y el ordenador posibilitan desde casa como comprar, visitas virtuales o lectura de prensa. Todo ello sin ayuda externa y de manera autónoma.
El director provincial de la ONCE, Alberto Morillas, incidió en la labor que desarrolla el Centro de Investigación, Desarrollo y Aplicación Tiflotécnica (CIDAT) de la organización, cuyo objetivo es procurar a sus afiliados los medios técnicos necesarios para su desarrollo global, laboral y educativo, para avanzar hacia la integración social.
Directamente o en cooperación con importantes centros realiza desarrollos y prototipos de programas informáticos o de elementos muy diversos. Entre los últimos avances destacan los teléfonos móviles parlantes, electrodomésticos dotados también de voz sintética o los cuadernos digitales para escolares.
En la actualidad hay una extensa gama de ayudas y tecnologías que facilitan la integración y la accesibilidad. Con los nuevos avances en este campo, comenzaron a emerger los equipos electrónicos analógicos, luego los primeros ordenadores personales para desembocar en la era de las comunicaciones con internet y la telefonía móvil al frente. De manera paralela, se han desarrollado los equipos tiflotécnicos.
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