Cada día que pasa la ciudad tiene que abonar a los bancos una media de 15.000 euros sólo en concepto de intereses. A esto hay que sumarle casi 20.000 euros diarios que le toca devolver (capital amortizado) por todos los préstamos que mantiene vigentes.

Éste es el resultado de dividir entre los 365 días del año los 5,4 millones de euros que tiene previsto pagar de intereses durante 2010 y los 7,1 que abonará para reembolsar el dinero prestado.

Pese a la abultada losa que le toca pagar, si las previsiones para 2010 de los gestores municipales se cumplen, el Ayuntamiento habrá conseguido pagar casi 6.000 euros diarios menos de intereses que en 2009, pues durante ese año la ciudad abonaba 20.600 euros por cada día (7,5 millones durante todo el año).

De hecho, la situación de 2009 es mucho peor que la prevista para 2010 porque, entre otras cosas, los intereses fueron más elevados que el dinero que consiguió dovolver el Ayuntamiento (que es lo que reduce el cómputo de la deuda). Es decir, se amortizó capital por 5,3 millones y se pagaron 7,5 millones de euros.

Con las previsiones de tipos de interés reducidos para este año que han hecho los técnicos de Economía, esas cifras se podrían invertir, para que el municipio devuelva más de lo que paga para beneficio de los bancos.

Estos datos son los que aporta el propio Ayuntamiento en su Plan Económico-Financiero de Reequilibrio, confeccionado para establecer un horizonte de mejora y recuperación de la situación de déficit y desequilibrio que presenta el organismo local.

El plan incluye previsiones hasta 2012 y, respecto a la deuda, se prevé que se sigan pagando a las entidades bancarias cantidades muy similares a las de 2010, salvo en 2012, cuando se podría producir un importante aumento. Las cifras que se barajan son 6,6 millones de intereses (18.000 euros diarios) y 11,5 millones de devolución de capital (31.506 euros).

Este gran repunte se debe a que empezarían a devolverse ese año (2012) los créditos que se están suscribiendo ahora para el saneamiento económico y el pago atrasado a proveedores.