Un año más, la Junta, la Diputación y el Gobierno central sumarán sus recursos materiales, técnicos y humanos para hacer frente a posibles situaciones de emergencias por lluvia y nieve en las carreteras de la provincia, donde podrán actuar conjuntamente con independencia de quién sea el titular y responsable directo de la red.

Según explicó ayer la delegada de la Junta, María José Sánchez, este año habrá 22 centros de conservación operativos (dos más que el año pasado), donde se ubicarán las maquinarias; 32 depósitos de fundentes y 40 quitanieves. Los depósitos tendrán disponibles un total de 4.165 toneladas de sal y 25.000 litros de salmueras (sal con agua). La principal novedad de este año, según apuntó el presidente de la Diputación, Antonio Martínez Caler, es la incorporación al plan de los 48 efectivos de los parques de bomberos de Alhama, Iznalloz, Huéscar y Cádiar. Antonio Cruz, el subdelegado del Gobierno, señaló que a estos efectivos pueden sumarse, si fuera necesario, 500 más de la Unidad Militar de Emergencia (UME) que tiene su sede en Sevilla, así como todos los recursos humanos de Guardia Civil, Protección Civil y personal de Obras Públicas de la Junta que operan actualmente en la provincia.

Para reforzar la coordinación habrá un órgano conjunto de decisión que estará ubicado en el Centro de Coordinación de Emergencias de la Junta del 112, que se encargará de centralizar la información y de gestionar los recursos disponibles. La gestión de las actuaciones previstas en el protocolo acordado se llevará a cabo desde este centro de coordinación operativa, constituido de forma automática tras la comunicación por parte de la Agencia Estatal de Meteorología de una predicción de fenómenos meteorológicos adversos.

El órgano de dirección y coordinación de este protocolo lo constituyen, igual que en años anteriores, los titulares de la Delegación del Gobierno andaluz, la Subdelegación y Diputación. Las tres administraciones concentrarán, además de los medios técnicos y materiales, todos los recursos humanos.

Del mismo modo, informarán a los municipios susceptibles de sufrir las causas del temporal y promover que dispongan de recursos propios para la retirada de nieve dentro de sus municipios. También recordarán a todos los ayuntamientos de la provincia la necesidad de que tengan almacenada sal y maquinaria, por si es necesario su uso ante una situación extrema.