Obras: 'Senderos para la memoria', de Juan Cruz-Guevara, 'Sinfonía de cámara, op. 9', de Arnold Schoenberg y 'Cuarta sinfonía en Si bemol mayor', de Ludwig van Beethoven. Director: José Luis Estellés. Lugar: Teatro Isidoro Máiquez de CajaGranada. Fecha: 25 de septiembre de 2009.

La temporada musical de Caja Granada se inauguró el pasado viernes con un concierto celebrado en el Teatro de Caja Granada Isidoro Máiquez, un espacio multifuncional que este año dará mucho que hablar en el mundo de la cultura. En su escenario pudimos ver a la Orquesta Ciudad de Granada, y al frente tuvo a uno de sus componentes: el clarinetista y director José Luis Estellés.

Granada es una ciudad rica en espacios para la escena y la cultura, si bien no todos tienen las condiciones acústicas óptimas del Auditorio Manuel de Falla. Aún así, la abundancia de espacios favorece la diversidad, algo de lo que los granadinos debemos sentirnos orgullosos. En este sentido, a la ya extensa lista se ha unido desde el pasado mes de mayo el Teatro Isidoro Máiquez de Caja Granada, una sala que cuenta con la particularidad de poder adaptarse a las necesidades del espectáculo que albergue. Para inaugurar la temporada de eventos de este año se invitó a nuestra OCG, que ofreció un concierto con obras de Beethoven y Schoenberg, además del estreno absoluto de Senderos de la memoria, obra compuesta para la ocasión por Juan Cruz-Guevara.

Con Senderos de la memoria Juan Cruz-Guevara ha querido acercarse al espíritu del Centro Cultural Memoria de Andalucía, para cuya reciente inauguración ha compuesto la obra. En este sentido, Cruz Guevara realiza una búsqueda de motivos de inspiración en su memoria, entre sus experiencias estéticas, y las aglutina dentro de una textura sinfónica rica y singular. A través de la yuxtaposición de secciones motívicas, caracterizadas tímbricamente, inicia un viaje por tonalidades cercanas evocadoras. Así llega a la sensibilidad del oyente por medio de elementos sensoriales sumamente sugerentes.

Enmarcada en una estética más conservadora dentro del catálogo del compositor, Senderos de la memoria es una mirada hacia lo mínimal, hacia el juego de tonalidades expandidas y el devenir tímbrico de una abundante paleta orquestal. Su estreno por parte de la OCG, con José Luis Estellés al frente, obtuvo una calurosa acogida del público asistente.

Sin duda, el punto álgido del concierto estuvo en la correctísima y depurada interpretación de la Sinfonía de cámara op. 9 de Arnold Schönberg que Estellés nos regaló al frente de quince componentes de la OCG. Esta obra, de difícil comprensión y exigente desarrollo motívico, convierte a cada uno de los quince músicos en solistas per se, pero encerrados en una textura camerística con múltiples referencias cruzadas. Por este motivo es importante el trabajo en las dinámicas y en el empaste tímbrico, retos que solventó magistralmente Estellés al frente de los músicos de la OCG. La acústica algo seca del Teatro Isidoro Máiquez favoreció, sin embargo, la audición de la obra, permitiendo descubrir los más sutiles matices en cada instrumento. Con su versión de esta obra José Luis Estellés demostró que la bondad como solista de alto nivel no está reñida con la maestría como director de orquesta.

Para concluir el concierto se interpretó la Sinfonía núm. 4 de Beethoven. Nuevamente debemos comentar el acierto del director al concebir su versión de la obra, pues los tempi dinámicos y la fluidez en la interpretación favorecieron el desarrollo de la obra. Fue una versión bien concebida, con momentos muy emotivos y brillantes en los vientos, que agradó al público y puso el broche final a este comienzo de temporada.