Se burla del mundo y llora con él sin decir una palabra. Ésa es la idea de la actriz Salomé Hadji con su espectáculo La caja de música, que pondrá en escena esta noche, a las 22.00 horas, en la sala Planta Baja, mañana, a las 21.00 horas, en el pub Entresuelo, y el viernes, a las 21.30 horas, en el Café Manila. Se trata de un espectáculo mudo, basado tan sólo en los gestos y en la música, en el que Hadji saca a relucir lo peor de la sociedad actual.

La caja de música es un espectáculo de calle que llega ahora a las salas. Trata de la historia de una caja de música que fue construida en Berlín en 1834 y que durante décadas permaneció encerrada en un sótano. El personaje de La Muñecota, la pequeña muñeca de la caja de música, decide salir cada cierto tiempo con curiosidad por saber cómo es el mundo exterior, pero las noticias que recibe de fuera la obligan a regresar a su caja de música.

"La primera vez que La Muñecota sale de su caja", dice Salomé Hadji, francesa de nacionalidad, aunque berlinesa de nacimiento, "lo hace en plena Segunda Guerra Mundial". "Hasta ella llega un periódico de la época hablando de todos los desastres que está sufriendo la gente y decide no salir a la calle".

"La segunda vez", añade la actriz, que estudio danza, circo y teatro de calle, "lo hace en estos tiempos y, a través de una radio, escucha todos los desastres que suceden en la actualidad".

A lo largo de 50 minutos de espectáculo mudo, Salomé Hadji hace que el personaje de La Muñecota viva sus aventuras y desventuras, sus ilusiones de amor y desamor, la amistad, el miedo, la felicidad y el encierro. La obra, no obstante, depara una sorpresa final.

"He estado trabajando durante bastante tiempo este espectáculo yo sola", dice la actriz, de 25 años. "Soy la responsable de todo y no tengo a nadie que me supervise el trabajo", comenta.

Salomé Hadji comenzó a practicar la danza desde los cuatro años. Luego, con 20, decidió estudiar teatro y circo en París, y posteriormente se vino hasta Granada, en donde permaneció unos años. Actualmente vive en Madrid, donde prepara sus obras.

"La obra trata sobre todo de la curiosidad del personaje por descubrir qué es lo que hay en el mundo exterior, qué es lo que hay en la calle, pero siempre, por una cosa o por otra, debe regresar a su caja, mientras se va deteriorando por el paso del tiempo", explica la actriz.

La tercera vez que la muñeca decide salir de su caja, descubre una televisión y la enciende, pero en cuanto suena la música de los informativos, decide apagarla. Es el mundo del futuro y ella se imagina que lo que habrá ahí fuera será otra cosa horrible. "Sin embargo, hay una sorpresa final", comenta Salomé Hadji respecto a este montaje.