Hace 100 años que Henri Matisse llegó a Granada. Estuvo sólo tres días pero la impresión que le dejó la Alhambra le acompañó ya para siempre. El Museo de Bellas Artes del Palacio de Carlos V inaugura mañana la exposición Matisse y la Alhambra para recordar la presencia del pintor francés en la ciudad. Hasta ahora sólo se han montado tres exposiciones relacionadas con el artista francés en España.

Nadie sabía nada de la visita de Matisse a la Alhambra hasta que la directora del Patronato de la Alhambra y el Generalife y comisaria de la muestra, María el Mar Villafranca, descubrió en el Libro de Firmas el autógrafo del artista. Con esta pista, la directora de la Alhambra comenzó a indagar sobre un viaje fundamental en la obra del pintor francés pero que había pasado desapercibido. En 1910, Matisse vino a España para 'curarse' de una crítica frustrante. Dos de sus obras más reconocidas, Danza y La Música, sufrieron el rechazo absoluto y el pintor decidió buscar entonces un nuevo lenguaje. Sevilla y Granada resultaron esenciales en aquella búsqueda.

"La visita, realizada el día 10 de diciembre, activó sus capacidades creativas revelándose ante sus ojos los acordes de las composiciones ornamentales alhambreñas como el objetivo plástico perseguido desde hacía tiempo", escribe Villafranca en la revista Descubrir el arte. "La continuidad de las formas decorativas constituida por los zócalos de azulejos polícromos de las distintas salas y patios de la Alhambra, los paneles de yeserías profusamente ornamentados y los techos de madera con sus características composiciones de lazo conformaban un auténtico tapiz arquitectónico, una superficie que expresaba la riqueza plástica de la cultura refinada que los concibió", prosigue.

Entre las piezas que se van a exponer se encuentran 50 obras de Matisse que incluyen óleos, dibujos, litografías, cerámica y escultura, entre ellas tres cuadros que pintó en España y que se podrán ver en la misma muestra por primera vez, junto a los tres que realizó su amigo Francisco Iturrino en el estudio que ambos compartieron en Sevilla. También se expondrán sesenta piezas de arte islámico de gran valor artístico en cerámica, cristal, bronce o tapices, así como cartas, postales y fotografías personales del pintor francés procedentes de los archivos Matisse en Issy-Les-Moulineaux. Otros tejidos que coleccionó a lo largo de su vida, como mantones de manila, telas hispanomusulmanas y tapices de la Alpujarra también podrán verse desde el viernes en el Palacio de Carlos V. El pintor incluyó posteriormente estos tapices alpujarreños en algunas obras. Según Villfranca, "Matisse siempre se ha asociado con Marruecos pero no se dice nada de su viaje a España. Esta exposición reconstruye un capítulo que ha sido omitido en la historiografía matissiana". Matisse y la Alhambra, cuenta con la participación de la Sociedad Estatal de Conmemoraciones Culturales (SECC) y han colaborado cuarenta instituciones como el Hermitage, el MOMA de Nueva York o el Louvre de París.