La crisis sanitaria motivada por el rechazo social y sindical a la funsión hospitalaria en Granada protagonizó ayer buena parte de la sesión de control en el Parlamento andaluz. Tanto que la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, advirtió de que a su Gobierno "no le duelen prendas en oír a los ciudadanos, a sus representantes sindicales, y rectificar, y como hemos hecho e Granada, y en el resto de Andalucía, parar las fusiones".

La máxima representante del Ejecutivo autonómico contestó así a las críticas vertidas por los portavoces de los distintos grupos políticos, a la vez que incidió en que "si algo no hemos hecho bien, si algo no ha sido acertado o no se entiende por parte de profesionales y usuarios, no tendremos problemas en rectificar, en frenar y en negociar, como estamos haciendo en este momento, un nuevo modelo con todos los actores sanitarios", remarcó Díaz.

Todo comenzó con una pregunta del portavoz de Izquierda Unida (IU), Antonio Maíllo: "¿Cómo hemos llegado hasta aquí?", a lo que la presidenta respondió con los argumentos ya citados y congratulándose de "estar siempre dispuestos a escuchar a los ciudadanos", algo que acaban de "demostrar", según agregó, "con el acuerdo que hemos firmado con la mayoría de los sindicatos representativos de casi el 80% de los profesionales sanitarios en los hospitales de Granada".

No obstante, Maíllo incidió en el "repunte formidable" que han experimentado en el último año las movilizaciones en defensa de la sanidad pública en la comunidad autónoma. Entre las posibles razones que a juicio del portavoz parlamentario de IU explican dichas movilizaciones citó el que "se ha agotado la política del parcheo y de cerrar vías de agua".

Este no fue el único rifirrafe de la mañana de ayer, la presidenta de la Junta y la portavoz de Podemos, Teresa Rodríguez, se acusaron de "deteriorar" la sanidad pública. En una pregunta oral la dirigente de la formación morada exigió a Susana Díaz que "rectifique, escuche" a los ciudadanos y "deje de encubrir" los recortes en salud, y le advirtió de que con su actitud lo que está haciendo es dejar al PP "la bandera de la defensa" de este servicio público.

Rodríguez calificó de "simulacro" la mesa de negociación de Granada para abordar otro modelo a la fusión hospitalaria al "no contar" la Junta con todas las organizaciones implicadas como las plataformas de usuarios y profesionales.

Por su parte, Díaz replicó a Rodríguez criticando que "no haya escuchado lo que he dicho al telonero (por Antonio Maíllo) de la organización de la que usted es matriz (por Podemos)" y le censuró que considere un "simulacro" la negociación con sindicatos como UGT, CCOO o CSIF, que "representan" a los trabajadores.

"El acuerdo con los sindicatos ha desbaratado sus planes, falta la verdad al negar que defendemos la sanidad pública y ha preferido la bandera de la derecha que ha puesto en riesgo el sistema y puestos de trabajo, los mismos con los que comparten el deterioro de del sistema", sostuvo. La presidenta endureció el tono al indicar que Rodríguez "miente, difama y manipula al torcer la verdad" en relación a la rectificación de la Junta sobre las fusiones hospitalarias, y volvió a recalcar que su Gobierno "no tiene problema en rectificar los fallos o errores" que se hayan podido producir.

A través de un comunicado, el PP atribuyó a la presión ejercida y a la movilización ciudadana el que la Junta se haya visto obligada a "dar marcha atrás" en determinadas decisiones en materia sanitaria.

En otro orden, la directora gerente del Complejo Hospitalario Universitario de Granada, Cristina López Espada, destacó ayer que el acuerdo al que se llegó a principios de semana para iniciar un proceso de negociación en torno a la reordenación sanitaria cuenta con el apoyo de cuatro sindicatos que representan el 80% de la Junta de Personal y da respuesta a las principales demandas ciudadanas y de las plataformas.

Así, reconoció que "no encontraría justificado manifestarse" para pedir algo que ya se ha reconocido en este documento, como es "dos hospitales completos con sus urgencias finalistas". De hecho, consideró que se ha llegado "a un punto importante" y "hay que tenerlo en cuenta".

López Espada realizó estas declaraciones a preguntas de los periodistas en el Hospital del Campus de la Salud, donde avanzó que la hoja de ruta tras el inicio de acuerdo cerrado con cuatro de los seis sindicatos representados en las Juntas de Personal es mantener un nuevo encuentro con ellos para avanzar en la negociación, previsiblemente la semana que viene.

Sobre las dos organizaciones sindicales que se han desmarcado del acuerdo, el Sindicato Médico y USAE -que inicialmente firmó pero se retractó al día siguiente-, señaló que sería "estupendo" e importante para ella que volvieran a incorporarse, mostrándose abierta a esta posibilidad. No obstante, defendió la idoneidad de seguir avanzando en la negociación.