Las diferencias ideológicas entre los integrantes de la lista del Partido Popular y de los independientes de Lentegí, que concurrieron a estas elecciones municipales bajo la coalición de Izquierda Unida-Los Verdes son abismales: distintos programas, alejados modelos en la gestión de desarrollo local… No obstante, muchos coinciden en llevar el apellido Fajardo.

José María Fajardo Garrido era el cabeza de fila de los populares y Juan Manuel Arellano Fajardo el de la formación de izquierdas que sustituía a su vez a Ángel Fajardo, el ahora alcalde en funciones. Por índice de probabilidades, parecía que Fajardo sería el apellido del futuro primer edil. Sin embargo, el destino ha sido caprichoso y las urnas han decidido que se llame Antonio Ramírez el alcalde electo.

El nombre de este pueblo tiene origen morisco, Al Intisti o tierra de lentiscos, por la abundancia de estos arbustos en la localidad. Pero el apellido Fajardo que abunda en estos pueblos surge en Galicia, por lo que está ligado más a la época de la repoblación castellana tras la expulsión morisca. Según cuenta uno de los vecinos, en el cruce de Las Ratas habitaban los Fajardo, que se fueron desplazando a Lentegí y Otívar, así que todos proceden de un tronco común.

Los primeros espadas de las formaciones políticas de Lentegí no son los únicos Fajardo que completaban las listas electorales de los partidos presentados. En el PSOE, en el número 5 iba Gemma Fajardo Cañuelo, prima del candidato por IU. En el PP, aparte del número 1, en el 7 estaba su hermano Javier Fajardo Garrido; el 2 de los suplentes era su primo Manuel Fajardo Rodríguez. En IU, además del candidato a la Alcaldía, el número 2 era Marino Fajardo Aneas, el 3 es el actual alcalde en funciones, Ángel Fajardo Franco y el tercer suplente, Sergio Fajardo Villoslada. Todos, "familia, aunque sea retirada", según comentan. Ángel Fajardo, después de casi 20 años en primera fila de la política ha decidido dar el relevo y, como no podía ser de otra manera, lo hace a otro Fajardo: Juan Manuel que, naturalmente, tiene familia en otras listas y se ve habitualmente en bodas, bautizos y otras celebraciones con ellos.

Ya fuera de estas reuniones familiares, en política se convierten en encarnizados 'enemigos'. Sin ir más lejos, en estos comicios ha habido algunos incidentes. En la pasada campaña, el PP (según la versión ofrecida por José María Fajardo) colocó una pancarta en una farola y en la fachada de un bar. Después un miembro de la candidatura de IU se la descolgó para poner una suya. Previamente, Juan Manuel Arellano Fajardo, su primo hermano, le había recordado antes de colocarla que no era el "sitio idóneo" para ponerla, pues se trataba de la vivienda particular del actual concejal y número 2 en la candidatura de IU, otro Fajardo, en este caso, Marino Fajardo. A pesar de la advertencia, la colocó allí. Éste al salir de su casa se encontró con la sorpresa y la descolgó de la parte de su fachada y, tras recogerla, la puso al pie de la farola donde estaba atada. Al llegar José María, Marino le informó de lo sucedido y aquel comenzó a grabar la conversación en su móvil, según cinco testigos. Y es que para el amor y la guerra (y la política) no hay amigos, ni familia que valga.