Unas trescientas personas se han concentrado en la Plaza de la Aurora de Motril para mostrar su apoyo a la plantilla de trabajadores de Torraspapel y denunciar la situación laboral que sufren tras la implantación por el ERTE que la empresa Lecta impone a sus trabajadores, presuntamente por temas de carácter productivo y organizativo, que consideran "abusivo" y "desproporcionado". Una situación que les hará realizar diferentes paradas en la producción de la fábrica a lo largo del año -hasta 150 días-  y todo ello con un horizonte de incertidumbre al desconocer el calendario de los mismos. De hecho, al ritmo actual de semana por mes no les salen las cuentas. 

La plantilla, junto a las de las otras plantas afectadas en el resto de España, han denunciado ante la Jurisdicción Social de Madrid para intentar paralizar el expediente de suspensión de contratos al que se están enfrentando cada poco tiempo, y anuncian nuevas acciones legales. Actualmente tienen puestas seis denuncias y señalan que hay una más en camino. 

"Nos pararon el día dos, no teníamos previsto arrancar hasta el 9 a las seis de la mañana y nos han comunicado que el sábado tuvieron que arrancar una cortadora con algunos compañeros porque un pedido se quedaba descolgado, y ante el riesgo de perder a un cliente, había que hacerlo", explica el secretario del comité de empresa, José Antonio Alonso, quien incide que con esto se demuestra que "la implantación del ERTE es muy difícil y la política que tenían de que habían bajado los pedidos no es real". 

Alonso incide que una de sus demandas es que no cuentan con un calendario de aplicación de ERTE, "nos están avisando entre 24 y 48 horas antes de iniciarse, lo que está provocando que se merme la calidad de servicio que estamos dando a los clientes".

Concentración que ha contado con el respaldo de la mayoría de las fuerzas políticas presentes en la comarca, entre ellas la diputada nacional (PSOE), Elvira Ramón, y la parlamentaria andaluza (Por Andalucía), Alejandra Durán, así como la alcaldesa de Motril, Luisa García Chamorro, y los concejales del Ayuntamiento Antonio Escámez (PMás Costa Tropical), José Lemos (Ciudadanos), Flor Almón (PSOE), José G. Llorente (IU), David Martín (AxSí), así como Manuel Ruiz (Motril Punto Es). 

García Chamorro asegura que desde el Consistorio han mantenido ya varias reuniones con la dirección de la empresa y se han puesto en contacto con la Junta de Andalucía, para darle viabilidad. "Según nos dijo la empresa hay un problema de costes y hay una serie de proyectos para aminorarlos, están estudiando que líneas a través de la Junta de Andalucía o del Gobierno central pueden adquirir. Desde implantar calderas de biomasa hasta digitalizar el propio funcionamiento de la empresa para aminorar los coste". Además, asegura que próximamente se reunirán con el comité de empresa para conocer de primera mano la situación, "queremos conocer las dos partes, porque lo que nos cuentan desde el comité no se corresponde con lo que dicen desde la empresa". 

No obstante, asegura que muestran su apoyo a los trabajadores de la planta motrileña, "no sólo por el daño que se puede hacer a la economía de la ciudad que esta fábrica cierre y que todos estos trabajadores se vean en la calle, sino también el daño moral que se puede hacer a la ciudad, se trata de la industria más importante que tenemos en Motril tanto en creación de puestos de trabajo directos como indirectos. La Celulosa es una institución en la ciudad y desde el Ayuntamiento haremos todo lo posible por buscar soluciones para que mantengan sus puestos de trabajo". 

La diputada nacional socialista, Elvira Ramón, acompañada por la secretaria general del PSOE de Motril, Flor Almón, señalan que los trabajadores de Torraspapel pueden contar con los socialistas. "Seremos su altavoz y su apoyo en cuantas cosas estimen oportunas". 

Ramón incide en que apoyan las reivindicaciones de los trabajadores y de las trabajadoras porque "somos conscientes de lo que significa la empresa Torraspapel, no solamente para Motril sino para toda la Comarca", y muestra su solidaridad "con todas estas familias que están pasando una situación muy complicada".

Por su parte, la parlamentaria andaluza, Alejandra Durán, incide en que se trata de un ERTE "abusivo", por lo que solicita a la empresa que "reconsidere su posicionamiento. Los ERTE se hicieron para proteger a los trabajadores y no para que estos sean los que asuman las consecuencias de las situaciones en las que se pueda encontrar la empresa. Creemos que es el momento de que todas las instituciones se aúnen de la mano, y cada una dentro de sus competencias asuman el papel que les corresponda".  

Al hilo, Durán pide a la Junta de Andalucía máxima implicación, "una de las problemáticas es que la falta de inversión es uno de los problemas que ha podido llevar a la empresa a la pérdida de beneficios, y no los costes y la electricidad como se dijo en un primer momento. Para esa inversión tenemos una oportunidad maravillosa en Andalucía de poder contar con fondos europeos, de los que el 95% se encuentran sin ejecutar, si a la Junta le falta creatividad o ideas para ejecutar los fondos, esta sería una oportunidad". 

En la misma línea, el concejal de IU, José G. Llorente, lamenta que "se está descapitalizando el poco tejido industrial que tenemos en Motril por una decisión empresarial que no podemos compartir, son decisiones totalmente insolidarias con la situación que está viviendo este país, por lo que mostramos nuestro apoyo absoluto a las reivindicaciones que están haciendo los trabajadores y que no van más allá de pedir que se cuente con ellos, se negocie y se abra un proceso de diálogo". 

El concejal de Turismo y Desarrollo del Litoral (Cs), José Lemos, añade que queda demostrado que es una "fábrica rentable, que fabrica un papel único en Europa y cuenta con una producción que la convierte en emblemática para el propio grupo".

Además, el portavoz de Andalucía Por Sí, David Martín, relata que además de los puestos de trabajo que se ven afectados de forma directa por la interrupción del trabajo, el cese de la actividad interrumpe el trabajo de empresas auxiliares como el centro especial de empleo de Aprosmo que fabrica los palés de almacenamiento de la producción, las empresas de transporte y el propio Puerto. Y critica que no haya habido acuerdo entre la empresa y la parte social, pese a la disposición de los trabajadores, desde un primer momento para que la situación fuera lo menos lesiva.

Martín lamenta que el grupo empresarial haya justificado el ERTE en la reducción del número de pedidos debido al aumento de los precios y del coste del gas natural, ya que la factoría motrileña tiene una planta de cogeneración que suministra la electricidad necesaria para la producción interna y exportar a la red el excedente.

El representante de Motril Punto Es, Manuel Ruiz, incide en que "el ERTE recorta los ingresos mensuales, los trabajadores pierden poder adquisitivo pese a que el precio de los alimentos sigue subiendo, por lo que lo están pasando mal. No podíamos faltar a esta concentración para solidarizarnos con las familias motrileñas afectadas".