Hacen un llamamiento a la movilización para luchar en contra del cierre del servicio de Urgencias del Hospital de Motril

Lamentan que el centro motrileño funciona habitualmente por debajo de los mínimos de plantilla y con la llegada del verano y la renuncia de médicos por las condiciones, el riesgo es el cierre del servicio

Desde Salud niegan "rotundamente" que se vaya a producir dicho cierre y piden tranquilidad a los usuarios

Inician una recogida de firmas para evitar un posible cierre de las Urgencias del Hospital de Motril

La puerta del servicio de Urgencias de Motril / Alba Feixas

La preocupación por un posible cierre en el servicio de Urgencias del Hospital Santa Ana de Motril las tardes de verano por la falta de personal y la sobrecarga de trabajo a la que se ven sometidos los facultativos, aumenta cada día en distintos puntos de la Costa Tropical que ven como, de no ponerse una solución urgente, muchos vecinos tendrán que desplazarse hasta la capital de necesitar este servicio médico, aunque desde Salud niegan que esto pueda ocurrir.

Los vecinos han iniciado una recogidas de firmas ciudadanas, han presentado multitud de quejas por escrito y la convocatoria por redes sociales de una cacerolada para protestar por la sanidad pública.

Las reivindicaciones, insuficientes para muchos por lo que está en juego, llegan tras el llamamiento "desesperado" del Sindicato Médico Andaluz que advierte que la situación "cronificada" que vive este centro hospitalario puede provocar el cierre del servicio durante la temporada estival por el aumento de población, que somete a los profesionales médicos a una "sobrecarga" de trabajo "sostenida en el tiempo" que hace "inviable" el desempeño de sus funciones, algo que según apuntan, sucede en otros centros de la provincia, aunque el delegado de Salud y Consumo, Indalecio Sánchez-Montesinos, niega "rotundamente" que se vaya a cerrar el servicio.

Los profesionales sanitarios, que no pueden hacer una huelga general para protestar por la situación que atraviesan al tener que garantizar unos servicios mínimos, se unirán el próximo 13 de junio a la manifestación promovida por la Confederación Española de Sindicatos Médicos y que partirá por distintas ciudades españolas para reivindicar, entre otras cuestiones, la necesidad de actualizar la norma vigente para que garantice la calidad asistencial, la excelencia profesional y la seguridad de los pacientes.

Sin embargo, desde distintas administraciones, asociaciones, plataformas ciudadanas y colectivos hacen también un llamamiento a la movilización local para evitar el anunciado cierre de las Urgencias.

La parlamentaria andaluza María Ángeles Prieto, acompañada por su homóloga Olga Manzano y el secretario general del PSOE de Motril, Francisco Sánchez Cantalejo; ha incidido en la advertencia que los propios profesionales sanitarios llevan tiempo haciendo sobre la situación que atraviesa el Hospital Santa Ana de Motril, donde solo en el último mes han renunciado a sus contratos cuatro médicos mientras que el resto de personal también es "muy escaso".

Prieto, que ha afirmado que el Plan de Verano de Moreno Bonilla "solo tiene recortes y no se refuerzan plantillas", ha señalado que el centro motrileño "lamentablemente funciona habitualmente por debajo de los mínimos de plantilla y ahora con la llegada del verano y la renuncia de médicos a trabajar por las condiciones precarias que les ofrece la Junta, el riesgo es que directamente haya que cerrar las urgencias".

La socialista ha incidido en que no se trata de un problema presupuestario ni de falta de profesionales disponibles. "Moreno Bonilla gestiona la Junta con el presupuesto más alto de la historia y los sindicatos dicen que hay médicos disponibles. Pero las condiciones precarias con contratos de un mes, sobrecarga laboral y sin refuerzos los profesionales huyen". Además, ha criticado que el Ejecutivo andaluz ha vuelto a ofrecer contratos precarios de corta duración a pesar de la gravedad de la situación.

"Es una auténtica vergüenza. Con estas condiciones, los profesionales que sí quieren trabajar en este hospital se tienen que ir a centros con más plantilla, menos presión o directamente a otras comunidades donde se les ofrecen contratos dignos de dos o tres años", ha indicado mientras recalca que la situación es "muy grave y preocupante".

Los socialistas han hecho un llamamiento a la ciudadanía, "no hay motivos para que la ciudadanía de Motril este verano, en una zona como la Costa en la que la población se triplica en esta época, se vea obligada a ir a Granada para ser atendida" y ha asegurado que esto se debe al modelo sanitario de la Junta "asfixian la sanidad pública para que la gente tenga que irse a la privada. Así de duro y brutal, esto lo tenemos que parar y en este caso los únicos que pueden hacerlo son las y los motrileños y el resto de la ciudadanía de la Costa".

Por su parte, el secretario general del PSOE de Motril, Francisco Sánchez-Cantalejo, ha apelado a la fuerza de las y los motrileños para revertir esta situación tan grave. "Este hospital costó mucho conseguirlo y puede ir al traste por la gestión de Moreno Bonilla" y ha pedido que todos los vecinos tomen conciencia de la importancia de tener una "sanidad sea pública, gratuita, universal y de calidad".

Salud niega el posible cierre

Sobre la situación del centro motrileño, el delegado de Salud y Consumo, Indalecio Sánchez-Montesinos, ha salido al paso negando "rotundamente" que se vaya a producir dicho cierre y ha calificado que "nadie en su sano juicio puede ni pensarlo y menos decirlo. Es un mantra falso".

Sánchez-Montesinos ha calificado de "enorme irresponsabilidad" la incertidumbre que se crea con este tipo de anuncios aunque ha asegurado que con la llegada de la temporada estival tienen prepararse para "una situación compleja". "Cada año preparamos un plan de contingencia, un plan preciso y flexible para esta situación. Trabajamos sin escatimar esfuerzos, también el de la contratación que sea necesaria, con serenidad y con los datos anteriores para que la población esté tranquila, para que la asistencia sanitaria esté cubierta. Todos los años por estas fechas ocurre lo mismo, mensajes desalentadores, inciertos, que convoca una movilización innecesaria e injustificada y que transmite irresponsablemente una incertidumbre que va en contra de la relación sanitaria-paciente y, por tanto, del personal sanitario y, lo que es peor, de nuestra sanidad pública".

El delegado de Salud y Consumo ha destacado como el plan ha funcionado otros años y ha pedido tranquilidad y confianza en el personal sanitario.

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