Los servicios técnicos estudian nuevas ubicaciones para los contenedores de la polémica de Motril

El problema que sufren unos vecinos de la calle Santísimo de Motril desde hace varias semanas cuando les colocaron unos contenedores en la puerta de sus casas, con las consiguientes molestias al tratarse de viviendas de baja altura y con acceso directo desde la calle que se construyeron en su mayoría en la década de los 60, parece que está próximo a solucionarse. Según apuntan desde el Consistorio a Granada Hoy, los servicios técnicos están estudiando nuevas ubicaciones que alejen los recipientes de residuos de estas viviendas que están a pie de calle y reubicarlos en una zona cercana, pero que no interfiera con ninguna vivienda baja.

Varios vecinos presentaron instancias en el Ayuntamiento motrileño después de que realizasen un cabio de ubicación de tres contenedores y que estos acabasen en la puerta de sus casas, contando solo con una acera de aproximadamente un metro y medio de separación entre las ventanas o los propios accesos de las viviendas de los recipientes de residuos, lo que hace "inviable" poder abrirlas por el "fuerte olor a basura" que entra a las viviendas".

La situación ocurre desde el pasado 17 de junio cuando trasladaron los contenedores que estaban ubicados anteriormente en la calle Gabriel y Galán, en las inmediaciones de un supermercado y junto a varios bloques de pisos, hasta la misma puerta de estas casas.

En este sentido, el concejal de Calidad Urbana, Juan Fernando Hernández, explica a este periódico que el cambio de ubicación de estos contenedores no es una decisión que toma el Ayuntamiento. Con la entrada en funcionamiento de la nueva empresa encargada de la limpieza, hay calles del municipio a las que no pueden acceder los nuevos camiones, que son de mayor tamaño a los que operaban antes, por lo que los servicios técnicos reubican algunos de los contenedores para facilitar el trabajo a los operarios.

Hernández adelanta que los vecinos de la calle Santísimo no son los únicos que han mostrado sus quejas por estas nuevas ubicaciones. "Entendemos que la gente no quiere contenedores en la puerta de sus casas, pero en algún lado tienen que estar, y esa decisión la toman los técnicos después de analizar las diferentes variantes como las rutas que se realizan o las cargas de los camiones. Ahora la nueva empresa tiene camiones de carga lateral y se ha tenido que reestructurar todo un poco, de hecho ha habido ubicaciones en las que los contenedores estaban colocados a la izquierda y se están cambiando a la derecha para que el camión los pueda recoger".

Al hilo, apunta que "son decisiones técnicas que realizan los servicios municipales proponiendo alternativas para mejorar la eficiencia de la ruta o el servicio", y añade que el nuevo contrato de limpieza se ha puesto en funcionamiento por fases -la segunda fase del contrato comenzará el próximo mes de febrero-, "la primera fase dura 10 meses y en ella se incorpora toda la maquinaria, se realizan los distintos cambios técnicos, nuevas ubicaciones para los contenedores o supresión de otras".