El Covirán Granada, más lejos de la permanencia en la Liga Endesa
La undécima jornada en la Liga Endesa dejó de manifiesto que hay dos equipos que, salvo giro extraordinario de los acontecimientos, van a tener que hacer poco menos que un ‘milagro’ deportivo para lograr la permanencia en la máxima categoría del baloncesto español. Uno de ellos es el Covirán Granada, que volvió a caer por décima vez esta temporada en once encuentros y que cierra la clasificación junto al San Pablo Burgos. Los de Ramón Díaz no son colistas por 13 puntos, la diferencia entre los anotados y los encajados.
La derrota en tierras isleñas ante el Dreamland Gran Canaria volvió a dejar claro que para competir en la ACB hace falta ser más constante en el juego y no basta con hacer un gran primer cuarto y ‘echarse a dormir’. Encima, los resultados no ayudaron y los equipos que le precedían en la tabla con tres victorias como el Baxi Manresa, el Casademont Zaragoza y el propio Gran Canaria, vencieron, por lo que son ya cuatro victorias las que suman. Por ende, sin llegar ni mucho menos al ecuador de la competición, los rojinegros se ven obligados a recortar tres triunfos de desventaja, algo que no es tarea fácil en una competición tan exigente como la Liga Endesa.
Y lo que viene no ayuda a ser optimistas, como tampoco el juego de los granadinos. Este sábado reciben desde las 20:00 horas al UCAM Murcia, segundo clasificado en solitario que tan solo ha perdido dos partidos y está cuajando una gran temporada. Posteriormente, tendrá que visitar Tenerife para medirse al La Laguna, cuarto clasificado con un balance de 8-3. La competición le dará un respiro el 3 de enero, día que recibirá en el Palacio de Deportes al San Pablo Burgos. La cita será fundamental porque de no sacarla adelante, el Covirán puede ir pensando en otra cosa teniendo en cuenta que deberá afrontar de manera consecutiva dos salidas. Primero a Barcelona, que con la llegada de Xavi Pascual está jugando a un gran nivel y, posteriormente, hasta Málaga para medirse al Unicaja, que en el Martín Carpena deja escapar pocos partidos.
No pinta bien el futuro para los rojinegros, que al margen del calendario, deben mejorar muchos aspectos de su juego. Para ganar en esta liga, no se le pueden conceder 17 rebotes ofensivos al rival ni tampoco perder 19 balones en ataque. Porque eso son nada menos que 36 posesiones extras para el contrario que, evidentemente, alguna aprovechará. El club está buscando refuerzos en el mercado, en concreto en la pintura, aunque no es la única carencia evidente que tiene el conjunto que entrena Ramón Díaz. Otra cosa será hasta dónde llegue el dinero para poder invertir en fichajes.
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