Ramón Díaz: “No siento que mi cargo corra peligro”

Ramón Díaz, entrenador del Covirán Granada, señaló de cara a la cita que tendrá el domingo su equipo ante el Valencia Basket que “para nada siento que mi cargo corra peligro”. Y lo argumentó señalando que “soy el primero que está fastidiado por no ganar y me hubiese gustado ganar más partidos o ganar algún partido, pero en ningún momento siento que mi puesto peligre. Con el club ni siquiera hemos llegado a hablar, ni de cerca, de esta situación”.

El granadino manifestó que “voy a luchar por mi equipo y por lo que siento. He sacrificado un millón de cosas para llegar a donde estoy y no porque haya perdido cinco partidos, ni seis, ni siete, ni ocho, ni diez voy a tirar la toalla. Voy a luchar a capa y espada hasta el último segundo para hacer que este equipo logre victorias”. Entre otros aspectos porque considera que “si viera que el equipo no estuviera conmigo o que no entrenara bien en el día a día, eso sería otra cosa, pero viendo cómo están los jugadores conmigo, viendo qué creemos en lo que puede suceder, estamos en la quinta jornada y creo que es muy pronto para empezar a lanzar esas cosas al aire. Ha habido muchos equipos que han tenido rachas de hasta 10 o 11 derrotas y que después han cumplido los objetivos”.

Sobre el estado físico de sus jugadores de cara a la cita ante el cuadro valenciano indicó que “hemos hecho otra buena semana de entrenamientos y seguimos dando pasos hacia ese equipo que estamos buscando ser. Físicamente no tenemos ningún problema grave, por lo que tenemos a todos los jugadores disponibles”.

Respecto al último encuentro disputado ante el Río Breogán, el inquilino del banquillo rojinegro se lamentó del primer cuarto realizado por su equipo y declaró que “los tres siguientes cuartos los ganamos, pero fueron tres minutos y diecisiete segundos los que hicieron que no tuviéramos opciones de competir, tras un parcial de 18-1, incluso parándolo dos veces”. Sin embargo, eso no es del todo exacto pues los parciales tras el primer cuarto (34-18) fueron 13-22 para los rojinegros, y 20-17 y 24-21 para los gallegos.

En cualquier caso, incidió en que “si no estamos teniendo claridad en ataque o no estamos teniendo eficiencia en el tiro, este equipo no se puede permitir el lujo de no defender”. Es más, resaltó que “si el Covirán Granada quiere ser un equipo sólido en la ACB, hay que defender muchísimo más de lo que está defendiendo, sobre todo en los momentos en los que no estamos acertados. Cuando todo va bien en ataque, cuando las dinámicas son positivas, te puedes permitir el lujo, entre comillas, de tener alguna mala defensa, pero cuando estás fallando tiros demasiado cómodos, es cuando realmente tiene que verse la solidez del equipo a nivel defensivo”. Pese a la clara derrota en Lugo, dijo que “creo que la prensa ha sido un poco dura con el equipo. Es verdad que fueron cinco minutos muy muy malos, pero jugamos 35 minutos donde fuimos competitivos y los parciales lo dicen, no solo digo yo”.

Díaz, que reconoció que “somos el equipo que somos y hay ciertos equipos que, en algunas posiciones y características del juego, están un poquito por encima de nosotros, por ello tenemos que intentar, con trabajo y con diferentes situaciones tácticas, reducir esas desventajas e intentar ser el equipo más competitivo posible”.

Cuestionado por la situación de Micah Speight, con el que no cuenta tras la llegada de Lluís Costa, el máximo responsable técnico del Covirán Granada apuntó que “su situación está por encima mía. Tanto la dirección deportiva como la presidencia se están encargando de su caso con su agencia y con el jugador”. Por último, respecto a Zach Hankins fue claro y dijo que “no está jugando al nivel que ni nosotros pensábamos que iba a jugar ni que él quiere jugar. Él es muy consciente de ello y está haciendo un gran esfuerzo para intentar volver a ser ese jugador que todos los que estamos aquí pensábamos que realmente era”. “Es muy consciente de que está mal”, sentenció.