Designación, dudas y confirmación

La historia que nos llevará al próximo 30 de agosto, día en el que comience la Copa del Mundo de baloncesto, se decidió el 23 de mayo de 2009. Era en torno a las siete y media de la tarde cuando en la ciudad suiza de Ginebra Arvydas Sabonis leyó con una sonrisa en sus labios el nombre de "Spain" como el país que iba a organizar el Mundobasket de 2014. Ya por entonces se sabía que Granada iba a ser una de las sedes del evento, pero no una cualquiera, porque la ciudad pujó y consiguió que fuera su Palacio de Deportes donde España iba a jugar sus partidos de la primera fase. En las previsiones de esas jornadas se señalaba que la selección iba a disputar tres partidos, pero después de la reestructuración habida en el formato de competición, serán cinco.

Ese día de mayo se consideró que las buenas relaciones entre la Federación Española de Baloncesto (FEB), en la figura de su presidente -José Luis Sáez-, y el Ayuntamiento de Granada habían llegado a su cúspide. Una de las figuras clave en el Consistorio es Francisco Barranco, trabajador municipal que en la actualidad está en excedencia por estar contratado por la FEB como cargo directivo. Los vínculos entre ambas instituciones se han traducido, entre otros acontecimientos, en la presencia de la selección española en varios partidos amistosos y la designación de Granada como una de las sedes del Eurobasket de 2007.

El buen grado de entendimiento entre la Federación y el Ayuntamiento fue determinante cuando se desató la crisis económica en todo el país, lo que puso en serios aprietos al Consistorio a la hora de abonar el canon establecido para acoger a la selección española durante la Copa del Mundo, que era de 2,5 millones de euros más el IVA.

Con la gravísima crisis económica surgieron los primeros rumores que señalaban que la designación de Granada como sede de la selección española en la primera fase de la Copa del Mundo corría peligro ante la imposibilidad de pagar el canon en el plazo establecido. Incluso, se comentaba que ya había ciudades, como la de Málaga, que se habían postulado para coger el relevo si caía Granada.

La FEB optó por apoyar al consistorio granadino y dar facilidades en la satisfacción de la cantidad comprometida, para lo que se estableció una serie de plazos con el propósito de evitar asfixiar más de la cuenta a la institución municipal. Así, poco a poco se ha ido abonando el montante establecido, que quedará completo a lo largo de este mes de febrero con el cumplimiento del último plazo.

También se ha permitido que no se acometan las costosas modificaciones necesarias para incrementar a 12.000 personas el aforo del Palacio de Deportes. Al final, la instalación se quedará como está, aunque se aumentará su capacidad con gradas desmontables: se pasará de 7.318 asientos a unos 9.500, sin bien la Federación Internacional de Baloncesto (FIBA) se da por satisfecha con 9.000.

Por tanto, la concreción con hechos -una vez más- de las excelentes relaciones entre la FEB y el Ayuntamiento permitieron disipar los mencionados rumores para dar paso a manifestaciones públicas encaminadas a recordar que Granada es la ciudad que disfrutará de la selección española en los encuentros en los que se jugará su pase a la ronda final de la Copa del Mundo de 2014.