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Hallan muerto en su coche a Michael Wright

  • Fue jugador del CB Granada durante la temporada 2002-2003 La policía sospecha que fue asesinado

Michael Wright, alero que jugó en el Club Baloncesto Granada durante la temporada 2002-2003, fue encontrado muerto ayer dentro de su coche en el distrito de Brooklyn (Nueva York). A falta de la autopsia, las primeras investigaciones indican que el jugador pudo ser asesinado al presentar una "herida profunda en la cabeza" y aparecer rodeado de "bolsas de basura".

Wright fue encontrado a las 11:00 horas de Nueva York (17:00 hora española) dentro su coche, un Lexus SUV aparcado en Midwood, dentro del distrito de Brooklyn, según informó el New York Daily News. El mismo medio informa de que la víctima presentaba una profunda herida en la cabeza y que el cadáver estaba oculto bajo un montón de basura en el asiento trasero de su vehículo, el cual, según los vecinos, llevaba aparcado en el sitio desde el pasado domingo. La policía no descarta ninguna hipótesis, aunque los primeros indicios hablan de asesinato.

Michael Wright tenía 35 años, no estaba casado y tampoco tenía hijos. Con 22 recaló en el CB Granada, donde militó durante una temporada, procedente del Slask Wroclaw polaco. Llegó avalado por haber jugado la final de la NCAA en 2001 con los Wildcats de Arizona formando equipo con Gilbert Arenas o Kevin Garnett. Además, jugó en la selección estadounidense que perdió contra España la final del Mundial júnior de 1999 en Lisboa, enfrentándose a Gasol, Navarro, Raúl López y compañía.

Tras su paso por el CB Granada, Wright pasó a jugar en grandes de Europa como el Alba de Berlín, el Besiktas o el Pau Orthez. En febrero de este año abandonó su último club conocido, el Cholet francés, aunque algunas informaciones apuntan a que el jugador, según la familia, tenía pensado seguir en activo durante dos años más.

Granada Hoy contactó con su entrenador en el CB Granada en aquella época, Antonio Gómez Nieto, quien se mostró sorprendido porque "era muy joven" y por la forma en la que ha muerto. "Cuando llegó aquí era casi un debutante, por eso era muy reservado y muy callado, pero también muy trabajador", recordó el técnico. "Tenía mucho porvenir", insistió Gómez Nieto, quien destacó su aportación al equipo "en un año difícil": "El trabajo en la pintura recayó en él porque habíamos perdido a Scott y Junyent, pero cumplió de sobra y se ganó ser un jugador más cotizado, que en Europa se fijaran en él. Y eso que para ser un '5' no era un muy alto, pero tenía un físico imponente, era muy duro pero también muy hábil porque era zurdo". "Es una pena", finalizó.

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