Gerardo 'Tata' Martino, entrenador del Barcelona, aceptó ayer que su equipo "ha fracasado" al quedar eliminado contra el Atlético de Madrid en la Liga de Campeones, aunque aseguró que se sentirá feliz si vence en los títulos a los que aún aspira su equipo, como son la Copa del Rey y la Liga.

"El fracaso tiene que ver con la Champions. Fue un fracaso y lo seguirá siendo, pero seré feliz si ganamos alguna otra competición", señaló el Tata. Martino tiene claro que la claudicación en la Liga de Campeones "seguirá siendo un fracaso, pase lo que pase en la Liga y en la Copa".

A pesar de las embestidas que han sufrido tras caer en Madrid, tanto él como sus jugadores, Martino defendió a su grupo: "Cualquier preparador querría estar en el sitio que estoy yo y dirigir a estos jugadores. Son muy pocos los que pueden entrenar al Barcelona". A su vez aseguró que sus jugadores son conscientes de lo que se juegan en el campo del Granada, donde el rival va a salvar la categoría, y los barcelonistas lo afrontan con la presión de no poder ceder.

"Ni una buena actuación mañana -por hoy- nos garantiza tener una buena chance con el Madrid; son seis finales y la de Copa una más", comentó, a la vez que destacó que su equipo tiene capacidad de reacción al recordar que el año pasado, tras quedar eliminado por el Bayern, "el equipo acabó siendo campeón de Liga".

A pesar de la trascendencia del partido de hoy y de la confianza que muestra en los suyos, el entrenador azulgrana reconoció que es "imposible estar recuperados de una eliminación en una competición donde había tantas ilusiones, pero no tenemos tiempo para lamentarlo".

"Este equipo sabe perfectamente lo que hay en juego en Granada. Y si algo ha mostrado este equipo es que entiende dónde juega; todos sabemos lo que nos jugamos mañana -por hoy-. No hay diferencias entre los rivales, todos son necesarios. Ahora lo que nos asegura depender de nosotros es obtener los seis triunfos", dijo.

De las declaraciones que hizo el argentino cuando finalizó el partido, al referirse que había encasillado a Messi, Martino redefinió su discurso: "Debo estar loco si dije algo así. Quise decir que (Messi) entrara menos en la elaboración del juego y fuera más decisivo". "No buscaba que Leo corriera más, sino que encontrara pelotas de más calidad, por eso que arrancase de extremo derecho", continuó el preparador, quien reconoció que lo que realmente le preocupa de su compatriota es que encuentre balones "que le permitan decidir un partido, no si corre más o menos".

"A veces me pongo a pensar que es tan difícil en este fútbol y en esta vida ser Leo Messi. Es todo tan injusto. Es muy difícil ser él en esta vida, sumamente difícil. No solo jugar a fútbol sino vivir también lo debe ser", finalizó el entrenador argentino.