Diego Mainz recibió ayer más de un sms 'cachondo' en su móvil, tras anotar su sexto gol de la temporada con la elástica rojiblanca, pese a ser defensa central. El madrileño 'prometió' tras el partido que "sigo siendo defensa, aunque ya me voy a tener que empezar a plantear otra cosa". Su alegría se pudo ver también dibujada en los rostros de Casares, Joselu u Óscar Pérez, para quien el partido fue muy importante en el aspecto personal. Pero, todos, por encima de individualidades, centraron su discurso en el equipo, y en la importancia de la victoria.

"Estoy en racha y muy contento por ello, nunca había metido tantos goles y es algo agradable", explicó Diego Mainz sobre su facilidad anotadora. Según el zaguero, lo de ayer "ayuda a quitar el sinsabor de Lepe". Y es que, a su juicio, "era un partido importantísimo, había que ganar sí o sí y lo hemos conseguido bien, me quedo con el buen trabajo de todo el equipo".

Muy importante era el choque para las dos novedades en el once inicial, tanto Óscar Pérez como Joselu. El asturiano indicó que "tenía ganas de estar ahí, de ayudar al equipo y recuperar el nivel". Según explicó el autor del primer gol, "poco a poco me estoy encontrando mejor y espero seguir ayudando al equipo", para lo que no le queda otra que "seguir trabajando igual y ponérselo difícil al míster". Además, sobre los fichajes recientes afirmó que "siempre viene bien la competencia, hace que no te relajes y aumenta el nivel del grupo".

En cuanto a Joselu, el futbolista perteneciente al FC Barcelona reconoció que "estaba un poco nervioso al principio, después de tanto tiempo el hecho de ser titular en casa y de jugar ante toda esta gente me puso nervioso, pero cuando pitó el árbitro los nervios se convirtieron en ganas y fui cogiendo confianza poco a poco". Joselu dijo estar "muy contento, tanto por el trabajo del equipo por el mío propio, he tenido la suerte de jugar una hora y eso me hace seguir trabajando con mucha ilusión para seguir teniendo oportunidades, hay mucha competencia y hay que aprovecharlas, eso es lo que he intentado".

También tuvo su oportunidad Javi Casares, quien dijo estar "contentísimo por volver a jugar después de tanto tiempo y no haberme resentido" y lo único que notó fue "falta de ritmo de competición". El jerezano consideró que "estuvimos muy bien desde el principio ante un rival que vino a jugar" y cree que ahora "hay que cambiar el chip fuera de casa".