Rencuentro feliz entre Orellana y Los Cármenes

Hay un aforismo que reza que segundas partes nunca fueron buenas. Ese no parece el caso de Fabián Orellana. El chileno, que volvió ayer a Los Cármenes después de su paso glorioso por el Granada CF en su travesía a primera, tuvo feeling desde el primer momento con la afición. Sus ganas sobre el terreno de juego y su habilidad prodigiosa con el balón hicieron las delicias del respetable. De hecho, en su primera intervención Orellana erró una entrega que complicó a la defensa, y el público reaccionó con una ovación y cánticos hacía su persona. La grada sabe que el sudamericano necesita mimos y aplaudió tanto sus genialidades como sus fallos.

El mediapunta chileno fue el jugador más destacado de los rojiblancos, sembró el peligro entre la zaga rival y demostró intensidad defensiva en algunas acciones del choque. Aunque, si hay que hablar de dedicación el que se lleva la palma es Iriney. Este pivote defensivo ya se ganó a la afición del Betis gracias a su desaforada pasión en el terreno de juego, y es probable que no tarde mucho en convertirse en un ídolo de la hinchada rojiblanca. El brasileño parecía un perro de presa cuando el balón estaba en los pies de los jugadores del Vitoria Guimaraes y también actuó con criterio en las posesiones del Granada CF.

Quien también empieza a cuajar en el esquema de Anquela es El Arabi. El delantero marroquí tuvo descaro en sus acometidas al área rival. Además, su gol le valió para meterse al público en el bolsillo, aunque probablemente por su condición de jugador más caro de la historia rojiblanca se le exigirá mucho más que al resto. En el 60' se llevó la aclamación de la grada cuando fue sustituido.

Las nuevas caras de esta temporada dejaron una buena impresión en su debut en Los Cármenes. Floro Flores trabajó bien en la pelea con los centrales del Guimaraes e intentó fusilar la pelota a la portería cada vez que tuvo la oportunidad. No obstante, si hubiera que nominar a alguno de los fichajes como el más flojo, ese fue Torje. El rumano no estuvo acertado en sus internadas por la banda y sólo un par de acciones de presión en la segunda parte provocaron que no tuviera un estreno decepcionante a todas luces.

Las incorporaciones que entraron en la segunda parte no tuvieron tanto tiempo para agradar a su nueva afición. Algunas jugadas aisladas como una buena parada de Toño en el tramo final del partido o la constancia defensiva de Juanma Ortiz sobre el extremo Milan del Guimaraes fueron lo más notable. Darwin Machís y Brayan Angulo contaron con pocos minutos y no se prodigaron mucho en el partido.

De los veteranos el más aplaudido fue Manolo Lucena, que se reafirma otra temporada más como un líder dentro de la plantilla.