El Covirán Granada ya prepara la cita del próximo sábado a puerta cerrada ante el Gran Canaria tras las buenas sensaciones que dejó en la octava edición del Memorial José Enrique de la Cruz. El triunfo ante el Bayern de Múnich ha ilusionado a la afición rojinegra, que disfrutó con su equipo y los nuevos fichajes pese a que se trataba de un choque amistoso ante un rival con pocos entrenamientos y varias ausencias que se encuentran disputando con Alemania el Mundial de baloncesto.

Pero eso no quita para que se vieran detalles del juego que, en principio, van a realizar a cabo los pupilos de Pablo Pin. Gustó mucho la agresividad defensiva que mostraron durante gran parte del encuentro, aunque el técnico granadino resaltó en rueda de prensa que “hemos jugado 35 buenos minutos”, en alusión a los cinco últimos en los que el equipo se relajó después de ir ganando por más de veinte puntos.

Kairys y Konontsuk

Entre los puntos positivos de la cita, destacó el buen porcentaje en tiros de tres (43,2%) y eso que por ejemplo Ziv no anotó ninguno de sus tres intentados, Thomasson anotó dos de siete y Cheatham tiró hasta nueve triples para encestar tres. Pero el porcentaje subió gracias al dominicano Ángel Núñez, que está para ayudar hasta la llegada del alemán David Kramer, que tuvo un 100% de efectividad en sus dos lanzamientos, Germán (dos de tres) además de Konontsuk y Lluís Costa con un 60% (tres de cinco).

De los nuevos fichajes, gustó Kairys que fue el más valorado junto a Costa (13 puntos) y Konontsuk. Este último tuvo el mejor más-menos del Covirán con más 16 y ayudó en muchas facetas. De él, Pin ya ha avisado que es un jugador de rotación con el objetivo de quitarle presión en su primera experiencia en España pero, al margen de sus 10 puntos, contribuyó con cuatro rebotes y una asistencia.

La dupla

Por lo que se refiere al base israelí Ziv, se notó que se entiende a las mil maravillas con Joe Thomasson, con el que ya coincidió en su país. Es potente en lo físico y va con decisión al aro, algo que será importante para aprovechar los bloqueos de los pívots. Y es que si hubo una diferencia con respecto al curso pasado es la mejora en el apartado físico. La idea del técnico granadino es contar con una rotación amplia. Germán ayudará mucho cuando haya que defender, Kairys se faja en la zona y falta por llegar Cristiano Felicio que se espera que esté ya en la ciudad el sábado.

El dominio del rebote y los 14 capturas ofensivas también fue otro dato a destacar y, sobre todo, las nueve pérdidas, una cifra que sorprendió siendo pretemporada y que fue la pasada campaña una de las lacras del juego rojinegro. Pasarse bien el balón también fue un dato revelador y la cifra de 21 asistencias así lo reflejan.

Además, falta por ver a David Kramer que llegará en plena forma pues está con su Selección y se le ven detalles de jugador con buena mano. Queda mucho por trabajar, es evidente, y fue tan sólo un encuentro amistoso pero las sensaciones que dejó el Covirán Granada fueron muy buenas aunque la Liga Endesa es otra historia.