Elecciones municipales Granada 2019

La alegoría de un cartel electoral: los candidatos comienzan la campaña

  • El nuevo alcalde podría salir de la terna Paco Cuenca, Luis Salvador y Sebastián Pérez

  • La Capitalidad Cultural de 2031 y el acelerador, los grandes retos en el horizonte

  • Quedan 15 días con propuestas de todo tipo para que la ciudad dé un salto

Hace apenas unas semanas aún quedaban viejos carteles de las pasadas elecciones autonómicas, casi reliquias junto a la carretera. Funcionaban como perfectas alegorías, con el de Unidas Podemos resquebrajado en el Serrallo y el de Juanma Moreno en la carretera de Maracena sufriendo una transmutación desde la pegada, cuando era la perfecta imagen del perdedor, pasando ahora a ser la foto fija de todo un presidente de la Junta.

Por eso, son más interesantes los carteles electorales cuando han pasado las elecciones y los protagonistas de la imagen se cargan de un simbolismo que no tenían en el comienzo de la carrera electoral.

Ahora, Francisco Cuenca (PSOE), Sebastián Pérez (PP) y Luis Salvador (Cs) son los que tienen más cara de alcalde en la foto de la propaganda electoral, en el caso del líder de Cs aliñado además con un sinfín de virtudes según el estudio de su cara que publicó en su web y que le hace ser, además del perfecto alcalde, el yerno con el que sueñan todas las madres, el James Stewart de las esencias granadinas.

La campaña electoral del 26-M ya está en marcha y, en este nuevo tablero electoral, lo importante no es tanto sacar un voto más que el contrario como ser capaz de llegar a más acuerdos con todas las fuerzas políticas posibles.

Los socialistas no ganan unas elecciones municipales en la capital desde 1987, con Antonio Jara. Y de esto hace 32 años aunque Jesús Quero y Enrique Moratalla pudieron gobernar gracias al apoyo de IU en el caso del actual gerente de la Fundación PTS y por el recordado tripartito en el caso de Moratalla. Y Paco Cuenca, que ganó en diferido las elecciones en mayo de 2016 con el crepúsculo de los dioses que fue la operación Nazarí.

Ahora, Cuenca aspira a ganar las elecciones en la capital. Necesitaría el apoyo de Antonio Cambril con Podemos-IU y, además, una nueva movilización de la izquierda, incluso mayor que la del 28-A. Y a la espera de ver los resultados de Vamos Granada con Marta Gutiérrez y comprobar su estrategia de pactos en un partido que se ha declarado al margen de los bloques derecha-izquierda y que ha mantenido una actitud beligerante con el alcalde socialista.

Mientras, Sebastián Pérez confiesa en privado que Granada "es una ciudad conservadora" y se aferra a que el bloque PP-Cs-Vox parte con ventaja en estos comicios.

El más confiado de todos es Luis Salvador, que dibuja en todas sus declaraciones un escenario que termina el 15 de junio con el candidato de Cs tomando ufano el bastón de mando.

Onofre Miralles podría ser el protagonista de El rostro impenetrable y su mensaje de cabecera es que –abogado de profesión– viene a vigilar el cumplimiento de la legalidad en el Ayuntamiento. El PP tiene que definir si Vox es su mejor amigo o su peor enemigo, sobre todo en un escenario en el que no está claro la pareja que podría elegir Miralles para bailar el 27 de mayo tras los comicios.

También está la sombra de Juan García Montero, el candidato de Centrados en Granada que ahora está dando pequeños pasitos hacia un lado del espectro político afirmando que todo el mundo conoce su trayectoria como un “político de centroderecha”. 

En verdad el tufillo electoral lleva impregnando la Plaza del Carmen desde hace meses, pero ahora llega el momento crucial para saber en qué lugar del salón de plenos se van a sentar en los próximos cuatro años. 

Paco Cuenca eligió el teatro del Zaidín como punto de partida en un barrio tradicionalmente de voto socialista. Sebastián Pérez, pese a que han corrido ríos de tinta sobre su precaria situación en el partido a nivel regional y nacional, contó con el presidente de la Junta, Juanma Moreno, para poner el engrudo en el cartel electoral.

Ciudadanos eligió la plaza Einstein, en el distrito Ronda y un fortín tradicional de los populares. Vamos Granada se llevó el acto a la plaza de las Pasiegas, aunque podrían haber elegido la puerta del TSJA por ser un partido que presume de haber sido el azote de la corrupción en los últimos cuatro años. 

Vox volvió a tropezar en la Fuente de las Granadas, donde la Policía Local le conminó hace unos meses a retirar un jeep militar y donde ahora la Junta Electoral le ha prohibido realizar el acto de pegada de carteles, por lo que pudieron alargar la sobremesa en el bar Reca, donde habían convocado el acto Cañas con Onofre a las siete de la tarde.

El partido de Santiago Abascal se ha visto obligado en los últimos años, con cambios de sede y de presidente, a llevar la política a las tascas, que es por otro lado el espacio natural para hablar tanto de la debacle del Barcelona en Liverpool como de la de Pablo Casado en las generales. 

Comienza oficialmente un periodo de 15 días que debe servir como un debate a gran escala sobre el estado de una ciudad a la que han llovido etiquetas en los últimos años: ciudad del deporte, de la música, de la literatura, de la ciencia... Habrá una lluvia de propuestas y hoy, por fin, Sebastián Pérez dará a conocer los detalles del gran túnel subterráneo bajo la ciudad que anunció hace meses. Con todo, la ciudad encara dos grandes retos: la candidatura para la capitalidad cultural de 2031 y, junto a la provincia, el proyecto del acelerador de partículas para convertir a Granada en la Silicon Valley del sur de Europa.

Un museo para la ciudad, propuestas de todo pelaje para la Alhambra, el turismo de calidad -como si las personas con poco poder adquisitivo no tuvieran derecho a viajar-, la revitalización del Sacromonte, la remunicipalización de empresas, la movilidad volverán a escena y cada partido recetará su bálsamo de fierabrás particular. 

Precisamente ahora se cumplen 40 años de las primeras elecciones tras la vuelta de la democracia, el 3 de abril de 1979. Antonio Camacho, Antonio Jara, Jesús Quero, Gabriel Díaz Berbel, José Moratalla, José Torres Hurtado y Francisco Cuenca han sido los que han tenido el bastón de mando en este tiempo. La intención de los 17 partidos que se presentan, descontando al PSOE, es que haya un octavo pasajero en la Plaza del Carmen. 

Otra pretensión es que el 27 de mayo, tras los comicios, la foto del cartel electoral no sea la alegoría de un perdedor.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios