Viernes, sábado y domingo. Tan sólo han pasado tres días desde que arrancó, de forma oficial, la campaña electoral, pero lo cierto es que todos los partidos llevaban varios días calentado motores antes de que la noche del jueves se diese el pistoletazo de salida a la carrera hacia la Alcaldía. "Lo importante es que hablen de uno", comentaba algún que otro miembro de la ejecutiva de campaña de uno de los principales partidos y, si a esto nos ceñimos, está claro quién tuvo un estreno sonoro e "inteligente por encima de la media".
El estudio morfopsicológico de Luis Salvador fue el primer tema que generó debate en las redes sociales:
Cuando crees que un político no puede hacer más el ridículo llega Luis Salvador, candidato de Ciudadanos a alcalde de Granada, y publica el "análisis morfopsicológico" que le han hecho según la cara (¿dura?) https://t.co/ndxvac872I entre Teresa de Calcuta, Churchill y Einstein. pic.twitter.com/nExQZG4xJW
— Santiago Navajas (@santiagonavajas) 3 de mayo de 2019
Y en la línea, se fueron sucediendo diversos comentarios que hicieron saltar este estudio de la cabeza del candidato de Cs a la Alcaldía hasta los medios nacionales.
Estrategia de marketing o no, se habló de él –y mucho–, pero tampoco hubo que esperar demasiado para servir la siguiente polémica: luces, cámara y... un espectáculo de música y color sobre la Alhambra que planteó el candidato del PP, Sebastián Pérez.
Que parecen empeñados en seguir perdiendo votos. Creo que proponer soluciones para el tráfico, seguridad, turismo y ruido les vendría mejor que convertir el Albayzín y la Alhambra en un parque de atracciones.Si propone llevarse el "trenecito" a la puerta de su casa tiene mi voto
— Manuel Martín (@ManuMartin_Gr) 8 de mayo de 2019
Mientras que también había quienes apoyaban la propuesta: "Fantástica propuesta. En Toledo vi algo similar hace años y es todo un espectáculo", dijo @BlasDeLezo00.
Y así, se llegó al día de la pegada de carteles, donde el protagonismo se lo llevó Vox, cuando el impedimento de que realizasen la suya en la Fuente de las Granadas convirtió las redes sociales en un hervidero de reproches hacia la Junta Electoral por la decisión. Sin embargo, la campaña se juega en redes sociales, como ya se ha comprobado, y Miralles le dio la vuelta a la situación:
📢📢📢Tomen nota. Como no nos dejan los de papel, haremos pegada de carteles virtual en Granada. 📌Pon los hanstag: #TuVozEnGranada #CartelElectoral.📅 24 de mayo del 2019💰 Libro dedicado por @Santi_ABASCAL"La España Vertebrada"✅ Publica foto en Granada con cartel de Vox
— Onofre Miralles (@onofremiralles) 9 de mayo de 2019
Y de esta manera los afines a la formación 'empapelaron' la Granada virtual.
La siguiente, volvió a ser para Sebastián Pérez, y es que sin duda las propuestas del popular son las que más están dando que hablar, al menos de momento.
Su proyecto de túnel subterráneo volvió a recibir numerosas críticas que rememoraban las largas obras del Metro de Granada por la zona de Camino de Ronda.
Esto, le espetó por la red del 'pajarillo azul' Roberto García (@rgl1970):
¿Volver a abrir la ciudad de punta a punta como se hizo con el Cno. de Ronda cerrando comercios de forma definitiva es #LaGranadaQueSueñas, @SebastianGR1965?No, gracias, basta de proyectos faraónicos irrealizables, sólo sería la Granada que quitaría el sueño a muchos granadinos
— Roberto García (@rgl1970) 10 de mayo de 2019
Quien tampoco se ha librado de las críticas ha sido el actual alcalde y candidato por el PSOE, Francisco Cuenca, ahora de nuevo Paco, durante la campaña, o al menos así se ha presentado. El espacio de coworking que los socialistas plantean en Bola de Oro era una ironía para Paco Sanmartín (@PacoSanmartin2) que dirigió su tuit hacia el regidor granadino y le espetó: ¿Y después multamos? ¿Como a bares, pub y músicos?. Mientras en Facebook, Mari Carmen Martínez le señaló como responsable de tener "los barrios abandonados, sucios, jardines hechos polvo, una vergüenza".
Está claro que esto sólo acaba de empezar pero como se veía venir desde la precampaña, los tuit y los post en Facebook vienen afilados y los políticos, directa o indirectamente, tienen que salir a capearlos. Porque al final son votos, pero de momento, que hablen.
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