"Somos un colectivo muy vivo y con afán de conocimiento y aprender". Así resume José Rodríguez el espíritu de la Asociación de Alumnos Universitarios Mayores de la Universidad de Granada (ALUMA), ente que preside y que está íntimamente relacionada con la actividad del Aula Permanente también de la UGR. ALUMA es el brazo cultural y social del Aula Permanente, iniciativa que abre las puertas de la Universidad a un colectivo singular, el de mayores de 50 años.

Desde 1996 publican su revista anual de forma ininterrumpida, un logro que habla del carácter trabajador y entregado de estos universitarios sénior. El Aula de Formación surgió en Granada como iniciativa pionera en 1994 y dos años después comenzó la andadura de la Asociación. El listado de actividades que promueven es extenso, tan amplio como las ganas de seguir en carretera. "Los alumnos necesitaban actividades sociales y de ocio para completar las asignaturas en el aula", explica Rodríguez, que explica el funcionamiento de la Asociación en la oficina que ocupa la misma en el Espacio V Centenario, la antigua Facultad de Medicina. Le acompañan Rafael Reche y Victoriano Martín, secretario y vocal de Comunicación, respectivamente, de ALUMA.

Actividad en el Cubillas.

Defienden la necesidad de que la sociedad sepa lo que hacen los universitarios mayores. "Cuando te jubilas tienes que administrar tu tiempo, y es muy útil aprender", explica Reche. Reconocen que hay gente que vive sola, y que actividades como el Aula Permanente y la Asociación "les da la vida". Se trabaja duro, porque quien entra en el Aula Permanente -hay lista de espera- se compromete a asistir a las clases y a presentar las tareas, pero les compensa. "También participan en grupos de investigación", señalan sobre la actividad académica que llegan a desplegar. Eso sí, no tienen exámenes, aunque cuentan incluso con su acto de graduación para quienes completan los dos ciclos en los que se compone la docencia en el Aula Permanente

"A nivel personal, es muy satisfactorio", indica Martín, que es secundado por Rodríguez: "Venimos porque nos place venir". El Aula Permanente tiene una cuota de 165 euros, aunque existe la posibilidad de beca que cubre el 75% del coste para quienes acrediten cumplir con los requisitos fijados para esta ayuda. Algunas optativas cuestan 50 euros y, aparte, la Asociación tiene una cuota de 25 euros anuales, además de abonarse el coste de las actividades. "De los programas universitarios para mayores, el más completo es el de la Universidad de Granada", señala Reche. Sus dos patronas, Santa Perpetua y Santa Felicidad, son muy celebradas por sus miembros.

Una de las actividades de ALUMA.

Para matricularse en el Aula Permanente el único requisito es tener más de 50 años y ganas de ponerse a ello. La mayoría son mujeres, un 70%, estiman desde ALUMA. La preinscripción se hace en junio y para cumplimentarla es necesario ir a la oficina en el V Centenario. "Este año se han quedado 200 personas en lista de espera" para entrar en el Aula Permanente. 

"La calidad de la docencia es excelente", destacan sobre el día a día universitario. Reche apunta la necesidad de eliminar tópicos y "prejuicios". El Aula y la Asociación están abiertos para personas mayores con formación y sin ella. Han tenido compañeros de 90 años y otros que han ido a las clases ¡que impartían sus propios hijos! "Hay un abanico amplio de estudios", señalan sobre la configuración de esta formación, que también se puede cursar de forma virtual, aunque la formación, explica Reche, es "integrada en el aula con los alumnos de grado". El primer ciclo se compone de distintas asignaturas mientras que el segungo ciclo -que corresponde al cuarto curso- se conforma con seminarios y talleres. 

En la parte complementaria del Aula que desarrolla la Asociación hay concursos de fotografía, relatos cortos y pintura; tertulias semanales con autores consagrados; redición de su revista; de libros; senderismo por Granada, visitas a la ciudad, a la provincia, a los municipios de los propios alumnos; piragüismo en el programa Mayores a Bordo; viajes nacionales e internacionales; jornadas de intercambio con universidades españolas y extranjeras; debates intergeneracionales; grupo de teatro y coro; comidas de convivencia; o conciertos solidarios para recaudar material escolar para menores. En esta actividad colaboran con entidades como Almanjáyar en familia, Red Madre o con ONG que trabajan en el Sahara. El próximo concierto será el 13 de diciembre a las 19:30 horas a favor del Banco de Alimentos. Únicamente se pide colaborar con la donación de productos para bebés.

"Queda camino por recorrer, como es el voto en las elecciones en la Universidad o la representación en los órganos universitarios", tal y como hacen el resto de estudiantado, señala Reche en representación de la junta directiva, de la que también forman parte Inmaculada Cañavate, vicepresidenta; Sebastián Téllez, tesorero; Manuel Morales, vocal de Cultura; y José Francisco Heras, vocal de relaciones con la UGR. Se les puede encontrar en su oficina del V Centenario o contactar por correo electrónico (alumaasociacion@gmail.com) o en el teléfono 958 24 28 35 (de lunes a miércoles de 10:30 a 13:00 horas).