El Ayuntamiento de Granada, que la semana pasada se sumaba a la petición de otras ciudades andaluzas para que la Junta de Andalucía autorice el cobro de una tasa turística a los visitantes, se ha abierto este miércoles a ceder una cantidad de lo que se recaudaría con este impuesto al sector turístico y hostelero para la promoción del destino.

Así lo ha asegurado este miércoles a preguntas de los periodistas el concejal de Turismo del Ayuntamiento de Granada, Juan Ramón Ferreira, en una rueda de prensa en la que también estaba presente el secretario general de la Federación de Hostelería y Turismo de la provincia, Antonio García. Aunque para ello este impuesto primero debe ser aprobado por la Junta de Andalucía.

Desde la Federación granadina se mantienen por el momento en el rechazo a este impuesto. Sin embargo, en diferentes ocasiones han manifestado que, en caso de implantarse en Granada tras la teórica aprobación regional, esta sea de forma consensuada y que una parte de lo recaudado por este impuesto repercuta directamente en el sector turístico. Y no todo se quede en las arcas municipales.

A este respecto, Ferreira se ha mostrado "absolutamente de acuerdo", y ha asegurado que la postura del Consistorio granadino es la de negociar con el sector la implantación de esta tasa turística una vez que la Junta de vía libre para su cobro.

"Necesitamos que la Junta lo regule y que esté consensuado con el sector, desde la seriedad y del rigor, para así tener una posición común. Pero nosotros no la impondremos sin negociar. La posición es consensuar y no haremos nada en contra", ha asegurado.

El concejal de Turismo, Juan Ramón Ferreira, la diputada de Turismo, Marta Nievas, y el secretario de la Federación de Hostelería, Antonio García

Además, Ferreira ha pedido que este impuesto al visitante se consensúe también entre el resto de municipios turísticos de Andalucía, de tal forma que la tasa sea igual en todas partes, para no caer en agravios comparativos.

Preguntado sobre el posible total que se podría recaudar gracias al cobro de esta tasa turística, ha asegurado que no han estudiado cuánto sería, "pero haciéndo un cálculo rápido, si cobramos un euro por visitante, serían unos 3 millones de euros más o menos", ha destacado. Esta cifra es inferior a las estimaciones que el anterior equipo de Gobierno del Ayuntamiento preveía, estimadas en unos 6 o 7 millones de euros.

Promoción turística

El presidente de la Federación de Hostelería y Turismo de Granada, Gregorio García, mostraba hace una semana a Granada Hoy su negativa a que se cargue a los turistas que visitan la capital nazarí una tasa sólo por el hecho de venir a visitarla o hospedarse en ella. Sin embargo, se abría a que, si finalmente era aprobada por la Junta con el consenso del sector, una parte de lo recaudado por este impuesto repercuta directamente en el sector turístico.

Para el presidente de los hosteleros granadinos, esa parte de lo que teóricamente se recaudaría con esta tasa debería ir destinada a la promoción turística del destino en distintos ámbitos. Algunas ideas serían invertir esa recaudación en campañas de promoción de Granada en ciudades extranjeras, en atraer a aerolíneas para que establezcan vuelos regulares con Granada y otros destinos y promocionar esos viajes, o en campañas de publicidad de la ciudad para animar a los visitantes a venir.

La opción de la tasa turística que manejaba en un primer momento el Ayuntamiento, tras las declaraciones de la alcaldesa Marifrán Carazo, era que esta sirviera más bien para pagar los servicios públicos que los turistas comparten con los residentes, y por los que no se les cobra. Aunque dejaba la puerta abierta a negociar con el sector sobre la misma.