La Cuesta de Santa Inés del Albaicín, donde se encuentra la Casa Agreda, está cortada por desprendimientos en varios edificios, incluido el histórico inmueble, que la ciudad recuperó como propiedad y que está llamado a incrementar la oferta cultural de Granada.

Así lo ha denunciado hoy el PSOE, que en la puerta de la propia Casa Agreda ha lamentado los años de abandono del patrimonio en la etapa de Torres Hurtado, asegurando que ellos durante el mandado anterior hicieron todo lo posible para la recuperación de la casa, "un edificio patrimonial de enorme valor cultural que se llevó a líos judiciales y está envuelto en dudas cuando lo que debía ser es de los granadinos".

"Estos días conocemos que está cerrado y tiene un abandono importante con dudas de seguridad y abandono de todo el entorno de la Cuesta de Santa Inés y de la Casa Agreda, que sufre una gran degradación después de mucho esfuerzo", ha dicho el portavoz del PSOE, Paco Cuenca.

Según Cuenca, cuidar la Casa Agreda es "velar por la cultura, porque Granada sea referencia, por eso exigimos al equipo de gobierno que se ponga a trabajar de forma seria, no solo que proteja sino que ponga ya un proyecto para su uso y disfrute y que sea un atractivo más, eso sí sería velar por la ciudad y no otras cuestiones".

La Cuesta de Santa Inés "está cortada por desprendimiento de los edificios del entorno. Hay distintos edificios así en estos dos años del bipartito, que ni viene ni sabemos qué opina ni sabemos qué va a hacer aquí".

El PSOE ha lamentado que se luchara en el anterior mandato por ubicar en la casa el museo de la ciudad y que ahora esté "abandonada", por lo que insiste en que el gobierno local sea "sensible y ponga en marcha un plan de rehabilitación del entorno y la puesta en uso de la Casa Agreda".

Según fuentes municipales, en la casa no se puede intervenir todavía ya que no se tienen las llaves de la propiedad, vendida a AIDE en época de Torres Hurtado, ya que el tema sigue judicializado y pendiente de la resolución del Tribunal Supremo.

Lo que sí se hace, como con el resto de edificios, es vigilar cualquier problema o desprendimiento que pueda suponer un riesgo para los viandantes o el propio edificio. Por eso, asegura que los Bomberos ya habían acordonado la zona al detectar varios elementos sueltos que podrían desprenderse, por lo que han estado vigilando el inmueble.