El coronavirus ha dado a Granada su primer día de esperanza completa. Los brotes verdes de los últimos días, con el aumento de personas curadas, se ven acompañados este lunes de otros datos positivos: es el primer día sin muertos desde el 16 de marzo y por fin esa triste estadística (114 fallecidos por Covid-19) ha quedado superada por el número de enfermos que han conseguido sanar del todo, que ya son 129 en la provincia.

Las medidas de aislamiento social adoptadas por imposición del Gobierno desde el pasado 15 de marzo se están notando ya en los hospitales, con la menor afluencia de personas con síntomas de infección y una drástica bajada del número de positivos nuevos cada día. Hoy han sido sólo 24 casos, unos registros propios del comienzo de la crisis a mediados de marzo. Con todo, la provincia ha superado hoy la barrera de los 1.500 infectados (1.501). 

El número de pacientes que han requerido hospitalización por coronavirus en Granada es ya de 808, aunque los 21 pacientes nuevos de los registros de hoy también son un dato positivo, dado que en las dos últimas semanas los incrementos diarios pasaban del medio centenar casi siempre. 

Las UCI siguen manteniendo la elevada presión que las había llevado casi al colapso en la última semana. Ya han requerido estos cuidados intensivos 84 pacientes, entre los que se cuentan muchos de los que ya han fallecido. El último día esta cifra solo ha aumentado en un nuevo ingreso.

Menos casos pero más graves

Los registros hospitalarios de los principales centros de la provincia, Virgen de las Nieves y San Cecilio del PTS, reflejan que el fin de semana ha estado marcado por un alto número de muertes y de personas que permanecen o ingresan en las UCI por la gravedad de su situación. Sin embargo, las altas hospitalarias para los pacientes menos afectados se han generalizado y el incremento de nuevos casos positivos es bastante más moderado.

La interpretación de estas cifras parecer ser la de mucha menor afluencia a los hospitales, que han conseguido dar de alta a decenas de pacientes menos graves ingresados durante las semanas de mayor avalancha; pero se agudizan los problemas de los enfermos más graves, que llenan las UCI o que llegan a fallecer sin poder revertir su situación. 

Desde el pasado 3 de abril hasta hoy, 6 de abril, los dos centros hospitalarios de la capital han dado 85 altas hospitalarias, una tendencia que venía desde el primer día de este mes. También tienen una treintena menos de personas aisladas en sus plantas, pese a que la presión sobre las UCI se está manteniendo y el número de fallecidos ha sido importante, una veintena en el fin de semana. 

La evolución de los nuevos casos positivos viene a confirmar esa tendencia nacional que tiene que ver con las medidas de confinamiento y de aislamiento social. Un ejemplo: en el último día el Hospital Virgen de las Nieves sólo ha registrado 6 nuevos casos positivos en sus análisis y el día anterior fueron 8. En la mayoría de las jornadas de las últimas semanas esas cifras rondaban el medio centenar diario.

La saturación hospitalaria, que la semana pasada había llegado ya a niveles muy importantes, sin saber hasta qué punto seguiría creciendo la enorme demanda de pacientes con síntomas leves y graves, llevó a aplicar el primer plan de contingencia en la provincia. La Junta lo tenía preparado para un escenario posterior (9.000 infectados en Andalucía), pero la situación de Granada era de las más preocupantes de la comunidad y se llegó a adelantar un poco. 

La puesta en funcionamiento de dos plantas del viejo hospital Clínico de la Avenida de Madrid para los pacientes menos graves, la habilitación de varias plantas Covid en el Materno y en Trauma (Virgen de las Nieves) o la utilización como UCI de las camas de reanimación fueron parte de esas primeras medidas de desahogo. 

Ahora la Junta estudia la aplicación del segundo plan de contingencia, el Plan 15.000, para esa cantidad de afectados en Andalucía. Esa segunda escala implicaría en Granada la instalación del hospital de campaña en la feria de muestras de Armilla (Fermasa) o el uso de algunos hoteles medicalizados (que ya se están utilizando como residencias provisionales para profesionales de riesgo). También quedan por habilitar dos plantas del viejo Clínico que por ahora no han sido necesarias. El uso masivo y generalizado de las camas de la sanidad privada en Andalucía es el último paso para una hipotética situación de saturación que podría no llegar si la tendencia de hoy se estabiliza.