La Delegación territorial de Educación en Granada iniciará el reparto de libros de texto que esté en los centros educativos a las familias que lo soliciten. Para ello, se ha establecido que serán voluntarios de Protección Civil de Granada los que ayuden en el reparto.

Fuentes de la Delegación indicaron que la entrega de manuales "no será masivo". Únicamente está previsto en los casos en los que los centros lo soliciten y para las familias que lo requieran. En los municipios más pequeños o donde no sea posible contar con la ayuda de Protección Civil se recurrirá a la colaboración de los ayuntamientos.

Los directores de los centros educativos deben hacer llegar al servicio de Inspección Educativa sus necesidades en cuanto al reparto de los libros de texto. A su vez, la Inspección se coordinará con la Delegación para hacer llegar a Protección Civil las peticiones de las familias. Esta medida se toma, indicaron desde Educación, para "garantizar el proceso" educativo en el tercer trimestre, que ha comenzado con los colegios e institutos cerrados a consecuencia del estado de alarma por la crisis sanitaria del coronavirus.

En el caso de Granada, la suspensión de la actividad docente presencial afecta a unos 201.000 matriculados en las distintas etapas educativas, desde primer ciclo de Infantil a Educación de Adultos. 

El reparto de manuales de texto se había realizado ya en algunos centros educativos tras contactar estos con la Subdelegación del Gobierno. Es el caso en Granada del CEIP Elena Martín Vivaldi, donde fue la Policía Nacional la que procedió a llevar los libros de texto que se habían quedado en los centros a las familias.

Por otro lado, la Consejería de Educación y Deporte ha solicitado a los centros información del alumnado que debe titular este curso, estudiantes del último año de las enseñanzas de Bachillerato, FP, FPB y Educación de Adultos para hacerles llegar, en función de las necesidades de los matriculados y de los recursos de la Administración, equipos informáticos. La Consejería indicó que se trabaja en la compra de estos recursos para atender a quienes no tengan ordenadores para seguir la docencia desde sus casas. El último día de clase presencial fue el pasado 13 de marzo, hace más de un mes y colectivos como Fampa Alhambra han apuntado a las carencias que sufren las familias para seguir las clases de forma virtual. Según una encuesta realizada por la Federación de Asociaciones de Madres y Padres, una cuarta parte de los hogares no dispone de ordenadores suficientes o de conexión a internet.