El Ministerio de Educación y Formación Profesional ha fijado, mediante una disposición publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el 24 de abril, cómo se acometerá el fin de curso y cuestiones que deberán encarar la administración educativa el próximo año académico 2020/2021 en las enseñanzas no universitarias. El documento señala lo que ya había trascendido, de que la repetición de curso será algo excepcional, y apunta otras cuestiones de interés para la comunidad educativa.

Así, señala la necesidad de disponer de "planes de contingencia para responder a nuevos periodos de alteración en la actividad lectiva" el próximo año académico a causa del Covid-19, especifica el texto.

También apunta a que se deben crear "grupos de expertos" que den "recomendaciones" para la "transición" a la enseñanza digital y valoren la "experiencia" de este inusual curso académico. En Granada, la suspensión de la actividad docente presencial desde el pasado 16 de marzo afecta a unos 201.000 matriculados en todas las etapas educativas no universitarias, desde Infantil a Educación de Adultos. Las familias, a través de una encuesta realizada por la Federación de Asociaciones de Madres y Padres de Granada (Fampa Alhambra), reconocen dificultades a la hora de seguir la docencia virtual por cuestiones como la falta de conexión a internet o de equipos informáticos. 

En cuanto a lo que se hará el próximo curso, desde el Ministerio se esboza que se podrá reorganizar el currículo del curso de forma excepcional. En Bachillerato, etapa que en Granada cursan 13.056 estudiantes de régimen ordinario, se autoriza que se apruebe un año más de permanencia. En todas las etapas se señala que repetir curso debe ser esporádico: "La promoción de curso será la norma general en todas las etapas, considerándose la repetición de curso una medida muy excepcional".  La duración del curso se mantiene y también se indica que se podrán hacer evaluaciones extraordinarias para recuperar materia. "La titulación debe ser la práctica habitual para los alumnos de cuarto de ESO y de segundo de Bachillerato y de FP", señala el Ministerio. 

En cuanto al tránsito al próximo curso, los docentes deberán hacer un "informe individual valorativo" en el que señalarán tanto el rendimiento del alumno como los "retrasos" que hayan sufrido a consecuencia del parón en la docencia presencial.