Los aparcamientos públicos de Granada van a evolucionar y van a dejar de ser un mero contenedor de vehículos. El área de Movilidad del Ayuntamiento de la capital ya trabaja con las empresas concesionarias para convertirlos en grandes centros intermodales para permitir el cambio de vehículo desde estos puntos y hacerlos también zonas de recepción y salida de mercancía y envíos. Un futuro al que adaptarse enmarcado dentro de la nueva movilidad en la ciudad que ha traído la pandemia del coronavirus y los cambios para en el futuro reducir el uso del vehículo privado, que de nuevo ha subido con el desconfinamiento y la desescalada.

El área lo tiene claro y así lo ha explicado hoy en Comisión informativa el concejal responsable, César Díaz. "Ya hemos hablado con gran parte de ellos, que representan al 65% de la oferta (unas 12.000 plazas) y queremos hacer un "planteamiento agresivo y potente" contando con que "uno de cada dos vehículos que entra a Granada es del Cinturón. Y el objetivo es contar con alternativa para cerrar el acceso de vehículos a lo que se está denominando como "almendra central" de Granada, a la que se sumará la zona de bajas emisiones en la que ya se trabaja, con restricción a los vehículos.

Así, lo que se quiere es que se conviertan en esos aparcamientos de borde (los que por su ubicación lo permitan) y desde ahí el usuario deje su coche y pueda tomar otra forma de movilidad: bicicleta, patinete, transporte público o a  pie. También que sean utilizados por mensajería y transporte: "Son espacios ideales para establecer también como punto de entrega y mercancía al comercio, para Correos, Amazon o cualquier compra por internet y hay buena sintonía con el sector", ha explicado Díaz.

Además, también se quiere que sean de bajo coste. "El problema es que cada uno tiene una concesión diferente que vence en un año distinto y cada uno tiene una tarifa diferente, pero está claro que son una oportunidad".

"Queremos que sean intercambiadores intermodales", ha explicado. Así, se quieren aprovechar las 17.000 plazas de rotación de las 30.000 que se disponen entre todos los parking (sólo en el Centro son 5.000 plazas de rotación de 8.000 totales).

Otra novedad es que se quiere dotar también a los parking de espacio de aparcamiento para bicicletas y Vehículos de Movilidad Personal (VMP) para que sean espacios seguros para estos usuarios. 

En cuanto a los aparcamientos disuasorios, Díaz ha resaltado la importante oferta de plazas que tiene la ciudad y ha destacado dos que tendrían esta utilidad clara: el del Nuevo Los Cármenes, con 700 plazas de rotación y plantas cerradas, y el de la Hípica, con 500 y también plantas cerradas. "Están en sitios estratégicos para desde ahí moverse al resto de la ciudad, al Centro, están cerca del Metro", ha dicho, informando también de un convenio con los comerciantes de Merca 80 del Zaidín para tener descuentos en estos aparcamientos para trabajadores y clientes. 

Otro que cumpliría las expectativas del nuevo modelo de parking y su utilidad intermodal para evitar entrar más vehículos a la ciudad es el de Neptuno, con 1.350 plazas. En este caso, se va a "mejorar la señalización" para que los usuarios dejen el coche y suban andando por Recogidas si quieren acceder al Centro.