La pandemia de coronavirus se dio por finalizada en mayo de este año, pero la normalidad ya había vuelto a las vidas de las personas y los servicios mucho antes. Pero para Granada, sus comunicaciones siguen estando en 2019. O peor. Antes de la crisis sanitaria se estaba mejor, contradiciendo el mensaje aquel del Gobierno en los peores días del confinamiento. La provincia lleva sin acoger un nuevo vuelo internacional desde un año antes incluso de que se declarara la epidemia global de Covid-19. Desde entonces, solo se han recuperado dos de los siete destinos internacionales que tenía la terminal granadina y ambos en destinos que ya operaban o había operado desde Chauchina hasta ese momento.

Menos aviones

El Aeropuerto está teniendo muchas dificultades para recuperar el brillo que tenía antes de la pandemia y el anuncio, no previsto, de la pérdida del vuelo con Londres a partir de noviembre empeora aún más el panorama de la terminal de Chauchina. Actualmente cuenta con ocho rutas estables en suelo nacional, dos de ellas al mismo destino operadas con distintas aerolíneas, Gran Canaria, que a través de Binter permite conectar Granada también con el resto de islas del archipiélago. Por lo demás son conexiones fijas Madrid, Barcelona, Bilbao, Palma de Mallorca, Tenerife Norte, además de Asturias y Melilla, esta catalogada como Obligación de Servicio Público. Con el extranjero, ahora mismo están París y Londres.

El anuncio de Vueling de suprimir el vuelo regular que tenía entre Granada y Londres tres veces en semana a partir del mes de noviembre supone un varapalo para las instituciones de la provincia, que ven cómo el trabajo para atraer aerolíneas y destinos internacional al Federico García Lorca se van al traste perdiendo uno de los mercados más atractivos de Europa y del mundo. Solo en el aeropuerto de Gatwick, el del sur de Londres, se operan 222 rutas aéreas, la mayoría en Europa, y Granada dejará de ser una de ellas. Destinos españoles desde la terminal de Crawley se quedan los principales como Málaga, Barcelona o Madrid, pero también otros que podrían compararse con Granada como Murcia y Almería (EasyJet), o Asturias y Santiago de Compostela (que mantiene Vueling, la misma compañía que cancelará el Granada-Londres-Gatwick.

Granada había recuperado el vuelo con Londres en abril de 2022 después de cerrarse el acuerdo con Vueling en el Fitur de enero de ese año. Antes, la provincia había recuperado su primer vuelo internacional tras la pandemia. En noviembre de 2021 aterrizaba en Chauchina el avión con París despegado desde el aeropuerto de Orly, al sur de la capital francesa. Parecía que el aeródromo iba a recuperar el pulso de los destinos extranjeros. Sin embargo, desde ese momento, no se ha anunciado ningún nuevo vuelo internacional y ya va para año y medio sin buenas noticias para el aeropuerto.

En un primer momento se achacó a las consecuencias de la pandemia en las aerolíneas, que había dado de baja muchos aviones y tenían que ir abriendo mercado de forma progresiva. Pero la excusa de las instituciones y la autoridades aeroportuarias ya ha quedado obsoleta. Los aeropuertos próximos a Granada han recuperado toda su actividad previa al Covid y algunos ya la están superando como Almería y Jerez de la Frontera, dos destinos a los que Granada había superado en 2019 en número de pasajeros gracias al incremento que le estaban otorgando los vuelos regulares al extranjero. En el caso de Almería, su aeropuerto recuperó ya en 2022 todo el tráfico estacional de verano con el que contaba antes del coronavirus, mientras que durante el año mantiene su única conexión extranjera con Londres-Gatwick, que también la tenía antes de marzo de 2020, con lo cual están en las mismas condiciones que en ese momento.

Granada, en este caso, lo tiene más complicado. Por un lado, en verano solo suele tener vuelos a destinos estacionales en suelo nacional, como son los que había con Ibiza y Menorca que este año no se han puesto en servicio, a diferencia de aeropuertos situados en zonas costeras. Por otro, lo que da el salto de calidad en las estadísticas de tráfico aéreo, la programación de vuelos regulares durante todo el año, es lo que le está faltando a Granada. Antes de la pandemia, el aeropuerto se había convertido en base de EasyJet, que tardó muy pocos días en irse una vez se cerraron los cielos por el Covid. La provincia contaba por entonces con siete destinos extranjeros estables: Londres-Stansted (operado por la mismísima British Airlines), y Berlín-Tegel, Milán-Malpensa, Nápoles, Manchstester, Burdeos y Nantes (todos ellos de EasyJet). Precisamente Nantes fue el último destino 'nuevo', por así decirlo, que estrenó Granada antes de  la crisis sanitaria. De eso ha pasado ya mucho. Sucedió el 31 de marzo de 2019. Se va camino de los cuatro años y medio sin nuevos destinos fuera de España.

Granada había alcanzado, entonces, los 1,2 millones de viajeros, su mejor cifra desde 2008 y se acercaba al récord del millón y medio de los años de Ryanair. El objetivo estaba cerca porque además existían opciones de crecimiento. Se iba a abrir otra ruta nacional con Valencia en mayo de 2020 y se tenían avanzadas las conversaciones para dos nuevos destinos foráneos atractivos como Marrakech y Oporto. Además, se trabajaba en recuperar la ruta con París, que Vueling había cancelado tras el verano de 2019 para dejarla en vuelo estacional durante Navidad, algo casi igual a lo que ahora ha hecho la misma compañía con el vuelo de Londres.

¿Y los nuevos vuelos?

Estos meses se presentan claves para la recuperación de los vuelos internacionales, aunque no cabe duda de que el palo que ha supuesto perder la ruta con Londres y el mercado británico no ayuda a recuperar la confianza de las aerolíneas en el destino Granada-Jaén. La Diputación Provincial, a través de su Patronato de Turismo y la Mesa del Aeropuerto, propuso a la Junta de Andalucía el pasado mes de marzo un "plan de choque" de cuatro millones de euros anuales en un periodo de dos años (en total ocho millones) para emular la manera en la que el Principado de Asturias ha recuperado sus conexiones aéreas tras la pandemia, una de ellas precisamente con destino Granada. Se trata de unas ayudas económicas que promocionan el destino Granada-Jaén en soportes de las compañías aéreas en trece destinos considerados estratégicos para hosteleros y empresarios de la provincia.

El plan fijaba además esos destinos: mantener los actuales, incluidos Londres y París, y sumar en España Valladolid, Santander, Valencia, Santiago de Compostela, Asturias (que ya está) y Zaragoza; y Casablanca (Marruecos), Bruselas (Bélgica), Amsterdam (Holanda), Milán y Roma (Italia), Frankfurt-am-Main (Alemania), y Lisboa (Portugal). Sin embargo, no hay noticias de nada de esto. De esta plan a dos años y del que ya han pasado seis meses ni siquiera se ha producido la reunión que en su momento la Diputación de Pepe Entrena solicitó al presidente de la Junta, Juanma Moreno. Es más, actualmente el plan y la idea están completamente detenidas. Fuentes de la Diputación de Granada, quien encabezó la iniciativa, han explicado a esta redacción que "tienen que revisar" aún el plan, ya que la nueva corporación, con Marta Nievas como diputada de Turismo, no ha tenido tiempo con el curso político recién empezado.