Granada pierde 53 millones por la caída de universitarios de fuera

El cúmulo de políticas de recortes que se vienen sucediendo desde 2011 en el sector educativo (unos 8.000 millones menos para la Educación pública en España) están dejando graves consecuencias no sólo en los estudiantes, que pierden derechos y posibilidades de acceso a sus estudios, sino también en las propias instituciones educativas, como la Universidad, que tiene que sobrevivir con menos recursos y una pérdida de alumnos. Una situación que, además, ha salpicado ya directamente a la provincia en materia económica ya que la caída de alumnos universitarios en los últimos años ha supuesto la pérdida de 53 millones de euros en Granada

Los Presupuestos Generales del Estado (PGE) presentados la semana pasada sacaron a relucir que la provincia se ha visto perjudicada a nivel educativo por los recortes de las partidas para becas y la subida de las tasas universitarias. Esto conlleva, entre otras cuestiones, la reducción del número de estudiantes matriculados este año en la UGR. La institución académica ha perdido en esta legislatura casi 5.000 alumnos y ha pasado de tener 54.126 estudiantes hace cuatro años a 49.230 este curso, un 8% menos desde que gobierna Mariano Rajoy.

Y no sólo por los recortes. La reducción de los programas de máster y estudios de postgrado o complementarios de la UGR ha hecho que también sea menos 'atractiva' para los alumnos de fuera, que tienen menos motivos para elegir Granada como universidad de destino.

Además, el aumento de las tasas universitarias en un 30% unido a la consecuente disminución de las posibilidades de acceso a la Universidad se ha plasmado en un claro incremento de la desigualdad social. El diputado socialista, José Martínez Olmos, afirmó ayer que cuando el ex ministro de Educación, José Ignacio Wert, disminuyó e incluso suprimió algunas de las becas más importantes relacionadas con la movilidad, el desplazamiento, el gasto de escolarización de los estudiantes e incluso la cuantía de las becas, "ya supuso una merma a la igualdad de oportunidades" para los alumnos. De hecho, según el PSOE, se ha reducido en dos puntos el número de alumnos que consiguen becas en Granada desde que gobierna el PP. En la actualidad obtiene estas ayudas al estudio el 62% de los alumnos. Unas becas que también han menguado en cuantía económica. Según Martínez Olmos, se ha "reducido la cuantía de las becas una media de 450.000 euros" respecto a los años de gobierno socialista.

Por tanto, un pilar tan esencial para la educación de los alumnos como deberían ser las becas, "se ha visto destruido y ha supuesto la consolidación del mal trato hacia los alumnos" de la UGR, aseguró Martínez Olmos.

Lo más importante de la congelación de los presupuestos en materia educativa es la disminución del número de alumnos en la universidad granadina. Ahora hay un 8% menos de alumnos que en el curso 2011-2012. Estos recortes suponen un impacto de 16.000 alumnos menos en las universidades andaluzas. Sin duda, esta situación perjudica la igualdad de los estudiantes que quieran optar por una formación universitaria o que la estén cursando en este momento, ya que muchos de ellos han tenido que dejar de estudiar debido a estas dificultades añadidas que afectan tanto a los estudiantes como a sus familiares. De esta forma, los padres de estos alumnos se ven en una situación de mayor ahogo económico para pagar los costes de la matrícula, ante una formación carente de becas, sumado a los alumnos que tienen que desplazarse para formarse en universidades de fuera de su ciudad.

Este es el caso de Granada, donde los alumnos suponen un enriquecimiento para la población en cuanto a los gastos en alimentación, transporte, hostelería y vivienda durante todo el año. La realidad es que las políticas educativas acaban perjudicando la educación y la igualdad de oportunidades y también causando un menoscabo del impacto económico.