Aunque parecía que no se iba a llegar y que iba a pasar el mandato sin los pliegos, el Ayuntamiento de Granada aprobará 'sobre la bocina' la licitación del gran contrato de limpieza y basura, atascado desde hace dos años y medio y que incluso llevó al Interventor a dar un 'tirón de orejas' a los políticos por las posibles responsabilidades de su demora. Este viernes será un día "histórico" para el área de Medio Ambiente ya que la capital sacará a licitación la prestación del servicio de limpieza viaria y recogida de basura, el mayor contrato que licita el Ayuntamiento. A grandes rasgos, será un contrato por 15 años, con un presupuesto base de licitación de 643 millones y con unas inversiones de unos 80 millones para renovación de flota e instalaciones.

Así lo ha dado a conocer el concejal de Medio Ambiente, Jacobo Calvo, quien ha destacado el "esfuerzo y trabajo" que se ha llevado la elaboración de estos pliegos. El contrato terminó en diciembre de 2020 y para entonces ya se tendría que haber tenido el pliego y el proceso de adjudicación, pero la anterior corporación de PP-Cs dejó solo hecho un borrador técnico que con la llegada del PSOE en 2021 a la Alcaldía por el cambio de Gobierno, hubo que rehacer bajo el nuevo criterio técnico y político. Y en eso han estado en estos casi dos años ya que la elaboración de los pliegos y sus posteriores vistos buenos no ha sido una tarea administrativa fácil. De ahí que el concejal haya agradecido el trabajo del director general del área, Juan Carlos González, y del resto de técnicos y áreas como la de Contratación. "Es un contrato con una responsabilidad importante. No había un contrato de estas características ya que el anterior se había adjudicado hace 50 años (en 1970). Requería esfuerzo, rigurosidad y el área ha hecho un gran trabajo". 

Los datos del contrato: inversiones, tiempo y personal

El pliego saldrá con un presupuesto base de 643.534.425 euros con un plazo de ejecución de 15 años, que coincide con el periodo estimado de amortización de las principales inversiones previstas. Y es que el capítulo de inversiones es muy importante en el pliego. Se contempla una inversión por parte de la empresa concesionaria de 80 millones.

En ese capítulo de inversiones se contempla la renovación tanto de instalaciones como de equipamiento. En inmuebles, se contempla la renovación de las instalaciones del Polígono Juncaril para los vehículos de recogida de basura y la construcción de unas instalaciones nuevas en El Florío que se destinarán a limpieza viaria. El objetivo es reducir los trayectos y los desplazamientos de la maquinaria para ser también más eficientes en el servicio. Además, se van a construir nuevos 'cuartelillos' donde se da servicio a los trabajadores de limpieza viaria. En la actualidad hay seis repartidos por toda la ciudad. 

En cuanto a maquinaria, se contempla la renovación del parque móvil y la modernización de equipos así como la sensorización e identificación de todos los elementos, incluso los contenedores y las papeleras, para tener más información con la que hacer más eficiente el servicio y planificarlo mejor. Se hará con un sistema avanzado de control de prestación con geolocalizaciones y revisión telemática del pesaje, por ejemplo.

También se contempla reorganizar servicios con una mejor gestión con el objetivo de garantizar "una prestación adecuada y aprovechar la experiencia de las empresas para esta prestación. No es tanto fijar la ruta o las frecuencias sino ser flexibles según la información obtenida de esos elementos". 

Calvo ha destacado que en los últimos años ha cambiado la ciudad y por eso se incluyen novedades "ventajosas" en el contrato para que el coste para el bolsillo de los granadinos sea menor, tenga mayores servicios y se proteja a los trabajadores. 

El concejal de Medio Ambiente, Jacobo Calvo, ha anunciado la aprobación de los pliegos.

Además, el contrato no estará dividido en lotes, sino que será unitario "en aras de una mayor eficiencia y mejor organización". 

Un servicio más sostenible y eficaz

En cuanto a la recogida de residuos, se mantienen todas las actuaciones actuales salvo la recogida del vidrio, que se hace con otra entidad. Se excluirá la gestión del vertedero de Víznar al estar ya clausurado y acogerá las determinaciones de las nuevas normativas como la de suelos contaminados. También se consolidará la recogida de la fracción de orgánica (contenedor marrón), implementada en 2022. "Ese va a ser uno de los retos así como la distribución generalizada de contenedores y control de lo recogido". 

Un capítulo importante será la sostenibilidad y la eficiencia, buscando reducir la contaminación del aire de vehículos y la contaminación acústica que puedan hacer estos mismos y las máquinas de recogida y limpieza.  Así, se van a exigir el cumplimiento de parámetros ambientales y se tendrán en cuenta también mejoras de estas condiciones en la oferta. Se valorará también el consumo de energía limpia, el control del consumo del agua y también su origen. 

Los pliegos incluirán también penalidades a la adjudicataria en caso de incumplimiento del contrato por cuestiones como la falta de contenedores, el defecto de vehículos, papeleras llenas, tardanza en resolver incidencias o falta de información requerida. También se pedirá que se incluyan canales ágiles de comunicación y nuevas vías de atención a la ciudadanía. 

Para optimizar los recursos, se contemplarán rutas de recogida variables a las actuales, adaptaciones de frecuencia y características propias de los contenedores. 

En cuanto a los trabajadores, Calvo ha recordado la "obligación legal de subrogar a los trabajadores actuales" que prestan el servicio con la empresa Inagra, que sigue con la continuidad del mismo como servicio básico pese a que estuviera caducada la concesión. 

Los plazos para llegar a la adjudicación

Según calvo, los criterios de adjudicación serán los necesarios para "discriminar la mejor oferta y que mejor represente los intereses de la ciudad", ha dicho el también portavoz el equipo de Gobierno.

Ahora, se asegura que la publicación de estos pliegos tras la aprobación este viernes en Junta de Gobierno Local será inminente. A partir de ahí se darán 100 días para que las empresas presenten sus ofertas y luego será el procedimiento de apertura de sobres, análisis de las ofertas y adjudicación, un proceso que se llevará otros tres meses. Así, en el mejor de los casos y contando con que no se retrase, se podría terminar el año 2024 con el contrato adjudicado. 

Un contrato atascado por el debate político

Calvo ha dado también una visión política de todo este proceso con la crítica al PP por no haber dejado realizados los pliegos. "Esto pode de manifiesto dos formas de gestionar: la del PP que cambió a Granada por Murcia, Málaga o Madrid pero que cuando se repartieron las carteras se quedó con los grandes contratos". "Valga como dato que en el borrador que hicieron, que no se llegó a firmar, se gastaron 90.000 euros en asesorías externas para llegar a un borrador a sabiendas de que tendría que haber estado licitado en enero de 2020", ha afeado. La otra forma "es la de este equipo de Gobierno, poniendo a Granada por delante, estableciendo como prioridad focalizar la calidad de los servicios y confiando en nuestro personal técnico. Han sido ellos con mucho trabajo a pesar de las dificultades y al plan de ajuste, los que lo han sacado adelante". 

Según Calvo, en el retraso han contribuido aspectos como el voto contrario del PP a recuperar la partida presupuestaria del servicio tras el Covid, la revisión del convenio de los trabajadores o la implantación de la recogida de basura orgánica. "Ha sido un duro peregrinar con más palos entre las ruedas que posibilidades de avanzar rápido, pero tenemos la certeza de que garantizará la excelencia a la que aspiramos".