La Vega y la Alhambra son dos parques naturales sin parangón. Dos pulmones en plena civilización que querría para sí mismo cualquier destino turístico en el mundo. Granada puede presumir de ambos y de otros tantos espacios verdes poco explotados a la hora de proyectarse para el viajero que busca contacto directo con el medio ambiente. Es por ello que el turismo granadino se ha puesto manos a la obra y, consciente del margen de crecimiento en este aspecto, se ha lanzado a implantar la 'Huella Verde', un sello identificable para sumar a su variada oferta.

Este proyecto parte desde el sector privado con la Federación Provincial de Empresas de Hostelería y Turismo buscando ya definir esta marca en pos de que Granada se suba de una vez por todas al carro de la sostenibilidad.

Representantes de la hostelería granadina se han fijado directamente en el modelo de Vitoria, que en 2012 recibió el Premio Capital Verde Europea. Un reconocimiento que se empezó a otorgar hace una década y que hasta la fecha la única ciudad española que lo ha ganado es la capital vasca.

La otra que estuvo cerca fue Barcelona finalista en la edición que concurrió Vitoria. Las urbes europeas que también pueden servir de espejo y que también han sido distinguidas por la Comisión Europea como un ejemplo de lo verde son Estocolmo (Suecia), Hamburgo (Alemania), Nantes (Francia), Copenhague (Dinamarca), Bristol (Reino Unido), Liubliana(Eslovenia), Essen (Alemania) y Nijmegen (Holanda).

Aunque los agentes del turismo granadino saben que hay que ir despacio y que no sólo en Granada sino en España en general hay un déficit de políticas verdes que hacen que este tipo de iniciativas público-privadas como pretende ser la 'Huella Verde' tengan que empezar a construirse desde la base.

El objetivo final es hacer un turismo “sostenible, de calidad y respetuoso” con su entorno

Por lo pronto, una delegación de la Federación Provincial de Hostelería ya ha visitado Vitoria para reunirse con representantes institucionales implicados directamente en el proyecto sostenible de capital verde. Un encuentro positivo que ha dado lugar a un primer posicionamiento de la 'Huella Verde' de Granada, un proyecto que ya cuenta con un logo identificable y en el que se está buscando la colaboración de expertos y catedráticos que fijen un criterio para la creación de un itinerario verde a través de parques, plantaciones de árboles y espacios naturales como el anillo que conforma la Vega.

El Consejo de la Federación aprobó hace unas semanas esta idea de la 'Huella Verde' con el objetivo principal de "sensibilizar, informar e implicar al empresariado turístico de la provincia de Granada en actitudes responsables sobre los efectos perjudiciales de la emisión de gases de efecto invernadero".

El plan es desarrollar el distintivo medioambiental en diferentes fases. Es decir, despacito y con buena letra para que la idea del "turismo sostenible, de calidad y respetuoso" con el ambiente vaya calando en el imaginario colectivo de la provincia. Por ahora, la Federación ya se está comunicando a todos los asociados el plan concreto y se está informando a los hosteleros granadinos sobre lo que significa la huella de carbono, los efectos que produce en nuestro entorno y qué medidas correctoras y compensatorias existen en este aspecto.

Asimismo, los hosteleros ya se están poniendo en contacto con diferentes administraciones para detallarles su propuesta de la ‘Huella Verde’ y ofreciéndoles la oportunidad de colaborar con planes públicos que persigan el mismo fin. El siguiente paso es pensar ya en la compra de árboles y empezar a hacer los estudios pertinentes para que en 2019 Granada pueda lucir orgullosa aquello de verde que te quiero verde.