Granada se ha convertido en los últimos años en un sitio de cónclaves políticos en reservados de hotel. El pasado mandato ya puso de moda las cumbres entre formaciones para la moción de censura que culminó con la Alcaldía de Paco Cuenca tras la irrupción del caso Nazarí, luego tras las municipales de 2019 la dificultad de un acuerdo de gobernabilidad más o menos tranquilo y lógico también conllevó un reguero de reuniones para la formación de un equipo de gobierno local y ahora tras el ‘bombazo’ de Sebastián Pérez se repiten las escenas. Fotógrafos arremolinados en busca de gestos que delaten y reuniones que se van más allá de la hora y media.

Lo curioso del encuentro negociador de ayer es que acudió el protagonista Luis Salvador (el alcalde al que ya han dicho abiertamente que desean expulsar tanto PP como PSOE) y que no dudó en asistir para tratar con los populares el tema. Es decir, que el regidor naranja que se define a sí mismo como un político espartano con “buen encaje” y acostumbrado a estas lides sigue manteniendo el pulso y no se le ve amilanado, por el momento, ante el órdago de Sebastián Pérez para sacar de su mano el bastón de mando del Ayuntamiento de Granada.

Hay que reconocer cierta vocación de Salvador, en su particular manual de resistencia para seguir siendo el número uno de la Plaza del Carmen con cuatro concejales y tanta gente en su contra. Así, tras acabar el largo Pleno en el Consistorio, Luis se puso ‘el traje’ de negociador para bajar junto al portavoz municipal de Cs, Manuel Olivares (quien en principio era el invitado del PP para tratar el tema), y con el edil naranja José Antonio Huertas, mano derecha del alcalde en un Ayuntamiento donde le crecen los frentes. De este modo, los tres representantes de Ciudadanos se reunieron durante más de una hora con el equipo negociador del PP formado por el secretario general, Jorge Saavedra, el edil César Díaz y por Luis González, el concejal y además candidato propuesto por el PP para relevar a Salvador si es que cae.

Los seis políticos estuvieron en una habitación reservada para esta situación en el céntrico hotel NH Victoria de Puerta Real y, al término de la misma, el alcalde mantuvo el semblante de “buen encajador” y se mostró confiado en mantener la Alcaldía durante todo el mandato de cuatro años como viene asegurando en esta nueva crisis de gobierno desde la ‘vuelta al ruedo’ de Sebastián Pérez para anunciar su marcha del PP y poner en jaque el gobierno de la Plaza del Carmen.

Sonriente, sin cambiar el rictus, después de una jornada maratoniana entre la sesión plenaria con alusiones a su posible marcha y la negociación política, Salvador no se mueve ni un milímetro de la silla. Quiere y está dispuesto a seguir siempre y cuando le cuadren los números. El regidor sigue en sus trece. Después de escuchar las razones del PP para que se aparte a un lado, Salvador señaló que no piensa en la renuncia. En concreto, el alcalde aseguró que todo lo que hagan ambos partidos “tiene que ser para sumar”.

Salvador señaló a preguntas de los periodistas que el de la tarde de este viernes fue “un buen encuentro”, aunque eludió ofrecer detalles del mismo, como tampoco lo hicieron los asistentes por parte del PP. “Este encuentro estaba comprometido, teníamos que tenerlo, y entre nosotros todo lo que hagamos tiene que ser para sumar”, afirmó el máximo responsable del Ayuntamiento de la capital.

Se trata de la primera reunión de la ronda de negociaciones abierta por el PP para recuperar la Alcaldía después de que el exconcejal de esta formación Sebastián Pérez presentara el miércoles pasado su baja en el partido tras 35 años de militancia, aunque seguirá como edil no adscrito en el Ayuntamiento de Granada. Las conversaciones continuarán, en cualquier caso, según las fuentes consultadas en ambos partidos. En concreto, desde el PP, Saavedra trasladó a Salvador la necesidad de que haya por parte de Salvador un gesto de “generosidad” dando “un paso al lado” para así apuntalar la estabilidad del mandato en su segunda mitad con un relevo en la Alcaldía.

En esta ronda de negociaciones que ha iniciado con su socio de gobierno, el PP pretende también reunirse con los grupos municipales de Vox y con PSOE y Unidas Podemos.