Patrimonio

Luz verde para rehabilitar la fachada del Carmen de Peñapartida de la Alhambra

  • El Patronato ha licitado las obras para mejorar el acceso principal y el entorno de la construcción con un presupuesto de más de 141.000 euros

La fachada del Carmen de Peñapartida de la Alhambra.

La fachada del Carmen de Peñapartida de la Alhambra. / G. H.

El Patronato de la Alhambra ha licitado las obras para rehabilitar la antigua fachada del Carmen de Peñapartida, ubicado en el bosque del monumento y que conserva dos torreones nazaríes, una red hidráulica de la misma época y restos arqueológicos por ser parte sustancial del cementerio de la Sabika.

El monumento ha informado de la licitación de las obras para mejorar el acceso principal y el entorno de esta construcción, conocida también como Carmen de los Catalanes, y que es propiedad del Patronato desde 2002.

La actuación cuenta con un presupuesto de más de 141.000 euros y servirá para rehabilitar, además de los accesos al interior de los jardines, la antigua fachada que persiste en la Plaza del Arquitecto García de Paredes.

Carmen de Peñapartida. Carmen de Peñapartida.

Carmen de Peñapartida. / G. H.

La directora del Patronato, Rocío Díaz, ha explicado que estas obras pretende poner el Carmen en las condiciones adecuadas de uso y ornato y que las mejoras servirá para acercar la apertura de esta finca, ligada al Bosque de las Alhambra y a la ciudad y que posee un rico patrimonio cultural.

Díaz ha recordado que, con estos objetivos, se realizaron de manera previa dos fases de prospecciones arqueológicas que constataron la existencia de gran cantidad de sepulturas y el uso funerario de al menos alguna zona que después se destinó a silos y mazmorras.

Las obras en licitación, que se ejecutarán en un plazo de cinco meses y también permitirán consolidar los muros de contención del terreno y reurbanizar el entorno, que supone alrededor del 25 % de la superficie del entorno y Bosque de la Alhambra.

En total, el Carmen de Peñapartida tiene una extensión de casi 20.000 metros cuadrados y conserva dos torreones medievales, una red hidráulica que descendía hasta el antiguo barrio de la Antequeruela, un "corral de cautivos" que consiste en silos excavados en la tierra que se usaban como cárcel de prisioneros y una parte sustancial del cementerio de la Sabika.

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