Sábado, seis de la tarde en el barrio del Zaidín. Muy cerca del Nuevo Estadio Los Cármenes, en la calle Pavía, el revuelo comienza a agolparse frente al bloque número 19. "¿Qué ha pasado?", se preguntó más de un vecino al percatarse de la presencia policial. Prácticamente nadie había escuchado ni visto nada. Casi una metáfora de lo que es la realidad de la violencia de género, una lacra que sigue siendo un tabú para muchas de las víctimas y que ayer se llevó otra vida en Granada: una mujer de 38 años había sido asesinada a puñaladas por su expareja sentimental. Se trata del segundo caso mortal por violencia machista que se registra en solo dos semanas en la provincia.

Sobre las 17:45 horas, la Policía Nacional recibió un aviso que alertaba sobre lo que apuntaba a un presunto caso de violencia de género en uno de los pisos del bloque número 19 de la calle Pavía, una de las vías que desemboca a la zona de la calle Pintor Manuel Maldonado, donde se encuentra el estadio Nuevo Los Cármenes.

Al llegar, se empezaban a confirmar las sospechas: una mujer, que pese a los intentos de los sanitarios nada pudo hacerse por salvar su vida, yacía con diversas puñaladas en su domicilio. No existían ninguna denuncia previa por violencia de género, sin embargo, varios allegados a la víctima apuntaban a su expareja, un joven de 24 años, que se encontraba en paradero desconocido, como presunto homicida.

Los agentes de la Policía Nacional comenzaron a recoger las pruebas pertinentes sobre este crimen, mientras que la víctima era trasladada hasta el Instituto Anatómico Forense de Granada donde se le iba a practicar la autopsia. Si bien, fuentes de la investigación ya confirmaban que el motivo del fallecimiento había sido los daños a consecuencia de las heridas por arma blanca que presentaba.

Poco más de una hora después de los hechos, cuando aún los agentes se encontraban recopilando pruebas en la vivienda de la víctima, una llamada desde Guadix confirmaba sus sospechas: el presunto autor era la expareja de la víctima, había huido hasta la ciudad accitana y, una vez allí, finalmente había acabado entregándose de forma voluntaria ante la Guardia Civil.

Sobre las nueve de la noche, aún quedaban en la zona los últimos investigadores, así como técnicos de los Servicios Sociales del Ayuntamiento de Granada, ya que la víctima tenía una hija menor edad. Todo ello mientras se confirmaba por parte de la Policía Nacional, que el homicida –un joven legionario de 24 años de edad, que estaba destinado en la base militar de Viator, en Almería, identidad confirmada por la agencia Europa Press– permanecía en dependencias de la Guardia Civil de Guadix en calidad de detenido, a expensas de ser trasladado hasta Granada capital y puesto a disposición de la Policía Nacional, encargada de la investigación.

A la par, fuentes de la Subdelegación del Gobierno en Granada indicaban que todas las evidencias apuntaban a que se trataba de un nuevo caso de violencia de género, aspecto que tan solo una hora después era confirmado por la Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género.

Portal del edificio donde tuvo lugar el crimen machista.

"Se confirma el asesinato por Violencia De Género de una mujer de 38 años en la provincia de Granada. La víctima tenía una hija menor de edad. Con esta confirmación el número de mujeres asesinadas por ViolenciaDeGenero asciende a 9 en 2020, siendo de 1042 desde 2003", publicaba la Delegación en su Twitter, un mensaje con el que finalmente se confirma este nuevo asesinato machista, el segundo que se vive en Granada en tan solo dos semanas.

Ante lo ocurrido, las redes sociales no tardaron en llenarse de mensajes de condolencia y repulsa ante este nuevo crimen por violencia de género, el segundo de este sábado en el país, tras el de otra mujer que había sido asesinada en Lugo por su pareja de varias puñaladas en el cuello.

"Podemos estar ante un nuevo asesinato machista. Es fundamental que nuestra sociedad acompañe, cuide y eduque para que no haya un asesinato más. No vamos a parar hasta conseguirlo. Un abrazo a familiares y amistades de la víctima. Nos queremos vivas", tuiteaba la ministra de Igualdad, Irene Montero, apenas unos minutos antes de que llegase la confirmación oficial.

"Perdonen que insistamos, pero nos están matando. No son casos aislados, ni extranjeros, ni locos. Es un problema estructural, su origen es la desigualdad. Negarlo, dudar sistemáticamente de las denunciantes, recortar en recursos, desprotege a las víctimas", publicó por su parte la jueza y delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, María Victoria Rosell, mientras que también se pronunció al respecto el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez: "Hoy dos mujeres han sido asesinadas en Lugo y Granada. Diez asesinatos machistas en lo que va de año. En total 1.043 desde 2003. INSOPORTABLE. No pararemos hasta acabar con la barbarie de la Violencia de Género. Mi abrazo y solidaridad para sus familias y amigos. Ni una menos".

Quien también mostró su pésame y repulsa por lo ocurrido fue el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, que mostró su "indignación y tristeza ante un nuevo hecho deleznable. Todo mi apoyo a la familia de la víctima. Granada y toda Andalucía seguirán luchando para erradicar la violencia de género de nuestra sociedad".

Este asesinato también fue condenado desde la Diputación Provincial de Granada, donde la diputada de Igualdad y Juventud, Mercedes Garzón, lanzó un comunicado para mostrar su dolor e indignación ante este crimen "brutal". "Es un sin sentido que llena de tristeza, de rabia y de impotencia a toda la sociedad", dijo la diputada.

"Absolutamente consternado por este brutal asesinato. Mi más absoluta condena y mi más sentido pésame a sus familiares y amigos. Ni una menos", condenó también el alcalde de Granada, Luis Salvador.