Hay quien dice que la vuelta a la rutina hay que tomársela con filosofía, aunque nadie dice con qué tipo de corriente filosófica hacerlo. Quizá por eso la vuelta al cole en el Ayuntamiento de Granada ha dejado a un lado eso del panta rei que decía Heráclito de Éfeso (con lo que defendía que "todo cambia y nada permanece") porque, al igual que antes de las vacaciones, la vida (política) sigue igual, mientras la ciudad contempla cómo no hay acuerdo entre los distintos grupos políticos municipales para abordar lo que se supone que ya había acordado. Así se vio este lunes cuando a la Junta Extraordinaria de Portavoces, la primera reunión con la que se inauguraba el curso político municipal, no acudieron todos los citados. PP y Vox dieron plantón a la cita que tenía como eje principal el llamado 'Pacto por Granda', una iniciativa que ya cuenta con 40 propuestas y que se abrirá a la "filosofía de la calle". Es decir, a la participación ciudadana.

Con el alcalde de Granada, Paco Cuenca, algunos ediles socialistas, entre ellos Miguel Ángel Fernández Madrid y Jacobo Calvo, el portavoz de Unidas Podemos, Antonio Cambril, y Luis Salvador -sigue siendo concejal por Ciudadanos en el Consistorio granadino pese a que fue expulsado de la formación en julio, además de formar parte del equipo de gobierno- formando la mesa de trabajo, la Junta de Portavoces avanzó en este acuerdo para el que ya hay aprobado un documento formado por 40 puntos, los cuales giran en torno a tres ejes fundamentales: el desarrollo económico; los derechos de las personas; y el Plan General de Urbanismo (PGOU) y el de calidad del aire.

Así, algunas de las iniciativas que ya se engloban dentro de los 40 puntos giran en torno a la dinamización del empleo y la economía local, lo cual se ha visto afectado por la pandemia del coronavirus; la mejora de la movilidad con el Área Metropolitana o la ampliación del Metro, para lo que se requiere la colaboración de la Junta de Andalucía; el soterramiento de las vías del AVE, que precisa de la luz verde del Gobierno central; el inicio de los trámites del PGOU, que como ya avanzó Granada Hoy, no podrá implantarse hasta aproximadamente 2027; así como el impulso de Granada como Ciudad de la Cultura, la Ciencia y el Turismo Sostenible; o la elaboración de un plan de Emergencia para luchar contra los cortes de luz en la zona Norte, una batalla que no deja de sumar nuevos capítulos.

Sin embargo, además de todo ello, la principal novedad de este 'Pacto por Granada' radica en que será la propia ciudad la que tenga voz directa. Tal y como avanzó el portavoz del PSOE, Jacobo Calvo, la idea es "hacer partícipe a la ciudadanía, porque estamos ante una oportunidad de generar un espacio participado tanto para las asociaciones como para los colectivos y entidades para incorporar sus demandas", para lo que se establecerá un calendario para recoger dichas propuestas, que sirva de hoja de ruta para trasladar tanto a la Junta como al Gobierno de España las cuestiones que les correspondan".

Así, el objetivo marcado es tener el documento definido antes de que culmine septiembre, fecha en la que habrá otra reunión de portavoces en la que habrá que comprobar si al igual que en la de este lunes vuelve a haber ausencias. Ello dependerá, como dejó caer el portavoz del PP, Luis González, de si se aborda algo definitivo y ya puesto en marcha o no, pues, según dijo, "no vamos a seguir enredando con documentos y debates para alargar la toma de decisiones. Lo que tiene que hacer el equipo de Gobierno tránsfuga es dejarse de reuniones y encuentros y ponerse de una vez a aplicar sus propias recetas para la recuperación, unas propuestas que, cuando estaba en la oposición, reclamó una y otra vez y que ahora quiere volver a debatir". "Lo que tiene que hacer, es poner todo eso que prometía, mintiendo descaradamente a los granadinos, en marcha", sentenció González.

Vox, por su parte, dejó clara su postura en contra al considerar, en palabras del portavoz de la formación, Onofre Miralles, que "no queremos ser cómplices de sus miserias y rechazamos formar parte de ese pacto que es solo palabrería y que esconde la falta de iniciativa y liderazgo del equipo de gobierno". Eso sí, Miralles sí que valoró algunos de los puntos que ya se recogen como el de la mejora de la calidad del aire, de lo que aseguró que "en Granada es poco saludable mirar al cielo porque hay serio riesgo de resbalar con el excremento de un perro". Ante ello, tildó de "falta de respeto iniciar nuevos pactos cuando hay infinidad de cuestiones que están aún sin resolver, como el soterramiento de las vías del tren a su paso por la Chana, unas vías que mantienen aislados a los chaneros", algo que "el gobierno municipal tiene las herramientas para arreglar, ya que Pedro Sánchez puede permitir el soterramiento de las vías del tren a su paso por este barrio".

Unidas Podemos, por contra, se congratuló de que, tras haber sido propuesto por esta formación a principios de mandato, el Pacto por Granada, "año y medio después, con otro equipo de gobierno, parece que por fin va a arrancar". En este sentido, el portavoz, Antonio Cambril, celebró que su grupo haya aportado "decenas de las medidas" que ahora forman parte de la iniciativa.

Toca ahora aguardar para comprobar cómo queda finalmente este Pacto por Granada y su hoja de ruta. Se acabaron las vacaciones de verano y el periodo de transición. Empieza el curso político de la nueva era de Paco Cuenca en el Ayuntamiento de Granada.

Descargue aquí el documento con los 40 puntos que ya se incluyen en el Pacto por Granada.