La Comisión de Patrimonio ha autorizado la eliminación de una veintena de grafitis de la Catedral de Granada, emblemática del renacimiento, y ha respaldado la catalogación de los sitios arqueológicos de Villavieja, en Algarinejo, y las Salinas, en La Malahá, debido a su importancia patrimonial.

Este organismo adscrito a Cultura ha aprobado el plan para suprimir los grafitis en las fachadas del conjunto catedralicio de Granada, que afectan principalmente a la parte inferior del perímetro del templo.

En cada uno de los actos vandálicos que han dañado la catedral se ha utilizado aerosol de pintura sintética directamente sobre el material pétreo, calcarenita bioclástica, a excepción de una de las pintadas que se ha hecho en la Puerta del Perdón sobre caliza micrícita de Sierra Elvira.

Para eliminar estas más de veinte pintadas se va a utilizar un microabrasímetro con pistola de boquilla de máximo 2 milímetros de diámetro de apertura que se aplicará con una presión controlada de entre 2 y 3 bares.

Se incidirá en las zonas pintadas, por lo que el área tratada quedará en un principio en un tono más claro que la circundante, sin que vaya a generar daños en el templo, referente del Renacimiento del siglo XVI del arquitecto Diego de Siloé.

La comisión también ha aprobado de manera definitiva la catalogación de los yacimientos de Algarinejo y La Malahá, dos espacios declarados Bien de Interés Cultural por su relevancia patrimonial y arqueológica que con este nuevo paso podrán presentarse a convocatorias de financiación para su puesta en valor.

Otra de las actuaciones valoradas por la Comisión ha sido la pintura de la Iglesia de San Miguel Bajo en el Albayzín, actuación para frenar el deterioro de su fachada.

Por otro lado, Cultura ha analizado el proyecto de la Universidad de Granada  para cubrir los hornos del complejo alfarero existente en el Campus de Cartuja, conocido como el Alfar romano, para protegerlos de las inclemencias del tiempo y musealizarlos.

Esta actuación, que todavía tiene un recorrido pendiente perfilando el proyecto básico presentado, tendría una inversión de más de 1,5 millones de euros para poder instalar una serie de recorridos que permitan una correcta difusión de uno de los complejos arqueológicos de más interés de la ciudad.