Pedro Mercado, rector electo de la Universidad de Granada, sobre la AESIA: "Es más importante mirar al futuro"

Recién elegido rector en primera vuelta de los comicios celebrados en la Universidad de Granada, Pedro Mercado Pacheco (Arjona, Jaén, 1964), asumirá el bastón de mando en unas semanas. Está en su despacho del Departamento de Filosofía del Derecho, en su Facultad, donde es conocido y reconocido por los estudiantes. “Es el rector”. “Sí, ya lo sé”, se escucha por los pasillos. Universitario, ha completado una carrera compacta en la UGR, institución de la que ha sido vicesecretario general, secretario y vicerrector de Política Institucional y Planificación.

–Ha conseguido salir elegido rector en la primera vuelta. ¿Lo esperaba?

–Era difícil en conseguir la mayoría absoluta en primera vuelta, sobre todo porque eran tres candidaturas. Estoy muy satisfecho por la respuesta, el respaldo y la confianza de la comunidad universitaria.

–Lleva en su programa mil medidas, ¿por dónde va a empezar?

–Por las que son más perentorias y, evidentemente, las que son más fáciles de implementar. Hay algunas que necesitan su tiempo pero hay cuestiones que serán casi inminentes. Hay que empezar a trabajar en la implantación de la LOSU. También medidas que tienen que ver con la gestión económico financiera, con la simplificación de procedimientos... Creo que van a ser importantes y se harán en los próximos meses.

–¿Qué va a ocurrir con el servicio de limpieza? La anterior gerencia inició un proceso que ha sido muy contestado por los sindicatos...

–En el programa electoral está la garantía de los puestos de trabajo que existen ahora mismo en la Universidad. El equipo de gobierno estará para garantizar esos puestos de trabajo y en el ámbito de la limpieza el compromiso es que las personas que están que sigan hasta que corresponda.

–¿Entonces seguirá con el proceso iniciado?

–No hay ningún proceso. El compromiso es que todas aquellas personas que vayan pasando terminarán como personal de la Universidad de Granada. No se convocarán nuevas plazas de limpieza.

–¿En qué términos cree que debe desarrollarse la negociación con la nueva gerencia?

–Una de las primeras medidas que se harán cuando se constituya el equipo de gobierno será convocar a las mesas de negociación. Todas han estado funcionando. Se hará un cronograma de reuniones y se señalarán los temas pendientes y se negociará todo lo que corresponde a condiciones laborales, tanto del personal docente e investigador como del personal de administración y servicios.

–En cuanto al personal docente e investigador, uno de los retos es el envejecimiento de la plantilla, una cuestión de la que se habla desde hace años. ¿Se va a tomar alguna medida a corto plazo?

–Se va a hacer un mapa de departamentos, que nos diga cuáles son las áreas deficitarias a tres, cinco y diez años. Se trata de ver dónde están las necesidades y empezar con las convocatorias de captación de talento más las convocatorias de plazas para dotar en esa área deficitaria del personal correspondiente que vaya formándose a través de los contratos de ayudante, para, de una forma planificada y ordenada, proceder a ese rejuvenecimiento.

–Sin conocer ese mapa parece claro que una de las áreas que puede tener más dificultades es la de Ciencias de la Salud...

–Ahí hay una determinación muy clara de hacer un plan especial, que tenga en cuenta las singularidades del profesorado y la relación entre el sistema sanitario y las titulaciones, especialmente en Medicina. Necesitamos plazas vinculadas de asociados sobre todo en especialidades clínicas. En esos ámbitos se nos va a demandar precisamente una acción singular.

–Para el próximo curso se ha aprobado una ampliación de plazas de primer curso en Medicina ¿está a favor de ampliar los grupos en otros grados de Ciencias de la Salud?

–Dependemos de la oferta que se aprueba a nivel de Distrito Único Andaluz y en ese marco es donde nos moveremos.

–Málaga ya ha anunciado un grado en Inteligencia Artificial, ¿La UGR tiene planes en ese sentido? ¿Cómo valora la apuesta de la UMA?

–La Universidad de Granada tiene una oportunidad importante. Desde la Junta de Andalucía se ha abierto la posibilidad de hacer y reordenar el mapa de titulaciones. Creo que debe acometerse donde la Universidad ha tenido tradicionalmente necesidades y demandas. Hay que ver también las nuevas titulaciones, lo que tiene que ver con la mejora de la oferta en el ámbito de las tecnologías, de las ingenierías, y lo relacionado con el acelerador de partículas y la demanda de nuevas titulaciones en ese ámbito, desde energía a materiales. Pero también en otros ámbitos que tengan que ver con las tecnologías industriales, que van a tener una gran demanda. La apuesta de seguir incrementando el número de grupos, tanto en Ingeniería Informática y en Telecomunicaciones, ya es una realidad. Ahora puede ser el momento para que, desde la Escuela y desde la Universidad, se pudieran lanzar otras propuestas si vemos la necesidad.

–¿Desaparecerá algún grado?

–¿Por qué se van a perder? No, no tiene que perderse ninguno. Es en los másteres oficiales donde está el futuro y donde está la gran apuesta de la Universidad. Ahí es donde van a estar las especialidades que nos demanda la sociedad.

–¿La privada obliga a la pública a repensarse?

–No. La Universidad de Granada no tiene que tener ningún miedo a competir con las privadas. Es importante es que todas las universidades, independientemente de privadas y públicas, juguemos con las mismas reglas de juego en cuanto a requisitos de calidad, a la implantación de titulaciones o la formación práctica.

–En inversiones ha propuesto un plan de cien millones, ¿cómo se paga esto?

–Son cien millones para las actuaciones básicas en los distintos campus en seis años. Si dividimos cien entre en seis salen unos veintitantos millones por presupuesto anual. Es algo viable y realista. De hoy para mañana es imposible. Si nosotros en el modelo de financiación tenemos garantizada la suficiencia financiera capítulo I y capítulo II, es decir, nominas y mantenimiento, lo que venga por financiación plurianual puede ir a esas infraestructuras. Hay otras que solo se van a acometer con financiación externa, como la Azucarera.

–¿Tiene definido cuántos vicerrectorados tendrá?

–El cuadro se va a redefinir en estos días.

–¿Contará con Enrique Herrera? Ha sido, junto a Francisco Herrera, clave en la apuesta por la inteligencia artificial en Granada.

–No es cuestión ahora mismo de hablar de personas, pero las personas valiosas siempre tienen que estar.

–El final de 2022 vino marcado por la designación de Coruña como sede de la Agencia Española de Supervisión de la Inteligencia Artificial, en detrimento de Granada. Se ha abierto incluso la vía judicial para reclamar esa decisión ¿Usted cómo lo ve?

–El Pacto de los Mártires lo que ha determinado es que es el Ayuntamiento de Granada el que asume ese recurso. Habrá que estar a lo que digan las resoluciones judiciales, pero en cualquier caso yo creo que es muchísimo más importante mirar para el futuro que mirar decisiones del pasado. Lo importante es que hay que de seguir desarrollando el ecosistema de inteligencia artificial, que hay que seguir luchando para traer iniciativas público privadas en el ámbito de la inteligencia artificial. Y no solo de la inteligencia artificial. Aquí hay que hacer grandes apuestas para volcar también el potencial de las nuevas tecnologías, desde el ámbito biosanitario a la sostenibilidad. Las apuestas deben de ser multidisciplinares. Por supuesto hay que seguir apostando lo que ya es Granada y la Universidad de Granada, que es un referente en Ciencias de la computación e Inteligencia Artificial.

–La IA ya ha llegado a las aulas... ¿Qué se va a hacer?

–Vamos a tener que reflexionar sobre el alcance que tiene nuestro sistema de docencia, de enseñanza y de evaluación. Tenemos que repensarnos y pensar en el significado de lo que es el aprendizaje, de la adquisición de conocimientos, y al mismo tiempo de la transformación digital de nuestra docencia. La esencia debe estar ahí, la transmisión del conocimiento con rigor, con excelencia. La Universidad tiene que formar profesionales.

–¿Hay cada vez una brecha mayor entre el estudiantado y el profesorado?

–Al contrario. Evidentemente, no se puede generalizar. La Universidad tiene que ir acompañando mediante programas formativos, mediante una formación constante.

–En su programa incluyó medidas para solucionar los problemas de vivienda. Granada, la ciudad, ¿cuida a sus estudiantes?

–El estudiantado es una riqueza también para esta ciudad, que no puede pensarse sin esa vida universitaria. También es verdad que se ha modificado el mapa inmobiliario. La Universidad debe de velar y al menos dar seguridad, dar confianza mediante una bolsa con alojamientos que cumplan requisitos mínimos.

–Porque actualmente queda para ellos lo que el mercado inmobiliario no coloca en otros sitio... No les cuidamos...

–Puede... La Universidad debe velar para que estén en las mejores condiciones.

–Otro tema que preocupa al estudiantado es el de comedores. Ya ha dicho que no va a subir el precio a estudiantes...

–Se va a mantener el precio de comedores para todo el estudiantado y para aquellas personas que de la comunidad universitaria que estén en condiciones de vulnerabilidad. No hay ninguna duda. A partir de ahí se hará un plan de viabilidad, de sostenibilidad y de futuro.

–Un menú a 3,50 con los precios que hay... En algún momento habrá que cambiarlo...

–Se garantiza para los estudiantes en esos términos. Es el compromiso de esta candidatura.

–¿Durante todo el mandato?

–Es el compromiso de esta candidatura.

–¿Ha hablado ya con el presidente de la Junta, Juanma Moreno, o el consejero de Universidad, José Carlos Gómez Villamandos?

–La misma noche de las elecciones [16 de mayo] tuve la oportunidad de hablar con el consejero y de ponerme a disposición para trabajar por el sistema público de universidades andaluz y, por supuesto, para defender también los intereses de la Universidad de Granada.

–Con él y con el resto de rectores hay que terminar la negociación del modelo de financiación. ¿Apuesta por lo que ha reclamado la UGR de tener en cuenta los resultados? ¿Cuándo habrá modelo? ¿En 2023?

–Esperemos que sí. En cualquier caso nuestra predisposición es de colaboración con lealtad, pero al mismo tiempo con la firmeza de defender los intereses de la Universidad de Granada en ese modelo de financiación donde sobre todo hay que garantizar la suficiencia financiera en cuanto a gasto de personal y gastos de mantenimiento, capítulo I y capítulo II. Confiamos en que el modelo tenga en cuenta los resultados de investigación, donde la Universidad de Granada puede perfectamente tener muy buenas resultados precisamente porque compite. Compite bien en muchos ámbitos por su excelencia y su calidad.

–Una pregunta para hemeroteca. ¿Cómo le gustaría ser recordado como rector?

–Simplemente como un rector que hizo su trabajo.