Recorrido festivo por la historia de Motril

El pregonero de las fiestas patronales, Manuel Domínguez, tocó el corazón de los motrileños en su pregón de inicio de las fiestas patronales. Domínguez emocionó a más de un centenar de personas que se dieron cita en la plaza de la Libertad con su brillante discurso, que revivió la historia de la ciudad y ensalzó las bondades de Motril, su gente y su clima. Y es que la ciudad vive desde el mediodía la renovada feria de día, que acerca la fiesta a todos los barrios de la ciudad, en la que un total de 13 locales han instalado sus barras para animar el mediodía y las tardes de feria.

La alcaldesa de Motril, Flor Almón, acompañada por el concejal de Cultura y Fiestas, Francisco Ruiz, así como por diversos miembros de la Corporación Municipal, ha sido la encargada de presentar al pregonero de las fiestas patronales en agosto, Manuel Domínguez García. Almón destacó su gran trayectoria como conocedor de todos los entresijos de nuestra ciudad. "Este año, las fiestas patronales cuentan con pregonero de excepción. Un motrileño incansable, un experto en nuestra ciudad y su historia. Un profesor cuya ilusión por enseñar nunca termina, que ha dedicado su vida a formar a generaciones de motrileños y ha divulgado su amor por su ciudad y sus vecinos", expresó Almón.

La alcaldesa hizo especial hincapié en "sus trabajos de investigación acerca de Motril, su historia y sus personajes, su afán por conservar y recordar nuestro patrimonio histórico, su labor política siempre comprometida con la cultura y, recientemente, las indagaciones en los misterios de nuestra ciudad".

Domínguez destacó las bondades de Motril, su gente, su clima y su historia y resaltó la oportunidad de ser pregonero de una ciudad que adora. "Soy motrileño y amo esta ciudad, con sus cosas buenas y sus cosas no tan buenas. Esto es algo de lo más grande que me ha ocurrido en la vida. Todavía no doy crédito a que un tipo como yo, tan atípico, tan poco folklórico, esté aquí delante de todos vosotros", dijo. "Esta ciudad entre el verde brillante de la vega y el azul intenso del mar, es a la vez antigua y moderna. Antigua por su cultura, por su historia, por sus tradiciones. Y moderna por los motrileños, gentes amables y abiertas, siempre con ilusión de futuro, siempre renovando su ciudad, constantemente adaptándose al presente, haciendo gala de ese carácter acogedor que siempre ha definido a las gentes de Motril", remarcó.