Rumbo a África con zapatillas para volar

Hay historias que merece la pena ser contadas. Y esta es una de ella. Los protagonistas son dos personas anónimas, Dani García Bocanegra y la accitana Lola Triviño, que se han embarcado en un proyecto solidario y altruista que comenzó como una locura y que tiene unas protagonistas claras: unas zapatillas. Ambos deciden viajar dos meses a África a "llevar unas zapatillas", concretamente desarrollando el proyecto en Etiopía.

Este viaje les ha llevado a miles de kilómetros de distancia para realizar el primer reparto de zapatillas y ropa. Ya ha sido entregado y ha sido recibido como el agua de lluvia, con gran alegría y esperanza. La satisfacción sólo es comparable al agradecimiento recibido.

Después de ver un reportaje en televisión que hablaba sobre dos poblaciones africanas de Kenia y Etiopía, descubrieron que sus habitantes no sólo corrían para sobrevivir sino que habían formado unos "club" de corredores para divertirse. La teoría de la evolución y la necesidad lleva a estos jóvenes a incluso, entrenando, batir récords de nivel internacional, sólo entrenando… sí.

Pero también hablaban de que la mayoría no tenían ni zapatillas. Van descalzos, sin contar la malnutrición y las condiciones de vida del "tercer mundo". Fue después de ver esto cuando, en una de sus "locuras", Dani le propuso a Loli que si no tenían zapatillas, ellos se las iban a llevar.

Y así ha sido. A día de hoy se encuentran en África con sus dos mochilones llenas de zapatillas de verdad y ropa técnica donada por un club de atletismo y un gimnasio de Ronda. Todos los gastos los han pagado ellos, sin pedir nada a nadie, enrolados en una nueva aventura solidaria de éstos dos fenómenos…

Y a la vuelta contarán cómo los Reyes Magos no son de Oriente, que son de Ronda y cómo aún quedan personas que sin hacer ruido, sólo esperan recibir el mejor de los reconocimientos, la sonrisa de un niño.