La licitación del nuevo contrato de limpieza y recogida de basura de Granada sigue sin avanzar. Lleva más de un año de retraso, Inagra mantiene el servicio con una prórroga de la concesión extraordinaria y aunque el gobierno dijo que a mediados de febrero esperaba sacar los pliegos, todavía se está a la espera. Y eso es una irregularidad advertida por la Intervención municipal, que da un 'tirón de orejas' serio al Consistorio en su informe sobre el cumplimiento del plan de ajuste del cuarto trimestre del 2021, presentado en el pleno del pasado viernes.

El interventor municipal es claro y habla de que el retraso es solo achacable al Ayuntamiento e incluso de la "responsabilidad" por la "dejación de funciones" de quienes tenían la obligación de convocar el procedimiento. 

En el informe se insta "a que se tramite de manera urgente una nueva convocatoria pública a fin de evitar que el presente contrato de gestión de los servicios públicos tenga carácter indefinido, impidiendo la entrada de nuevos interesados para prestarlos, con grave detrimento del principio de concurrencia". Y es lo que está pasando desde que caducó la concesión en diciembre de 2020. El Ayuntamiento, para continuar con la prestación de un servicio básico, tuvo que prorrogar el contrato con Inagra, que lleva más de un año ya prestando un servicio, y cobrando por ello, en lo que podría considerarse una irregularidad ya que no ha pasado por un nuevo concurso en detrimento de otras empresas y además con carácter indefinido hasta que haya una nueva concesión, que todavía tardará meses e incluso un año hasta que se concluya el proceso.

Además, se advierte que no consta en la Intervención que al cuarto trimestre de 2021 se hubieran realizado tampoco los trabajos en la reversión de los bienes y servicios objeto del contrato que debiera haberse producido antes del 1 de enero de 2021 al caducar la concesión y pasar todo los bienes (maquinaria, instalaciones,...) a propiedad municipal. Tampoco consta la elaboración de los pliegos técnicos que sustenten la licitación.

Por eso señala que la aprobación del nuevo expediente de contratación lleva un retraso "cuya demora en la adjudicación del nuevo contrato es solo y exclusivamente achacable a esta Administración". Y va a más: "Todo ello sin perjuicio de la responsabilidad que pudiera derivarse por la dejación de funciones de aquellos, que teniendo la obligación legal de tramitar y convocar nuevo procedimiento de licitación, no lo han hecho, dando lugar a que llegue el 31 de diciembre de 2021 sin que ni siquiera consten los pliegos técnicos de la nueva licitación", advierte el informe. Se podría estar por tanto incurriendo en un delito por esa dejación de funciones, de lo que advierte el interventor. 

Hay antecedentes respecto a la irregularidad de estos procesos de continuidad de contratos. Por ejemplo, la Cámara de Cuentas en 2019 advirtió a la Junta por contratar durante un año los servicios del edificio BIC mientras se tramitaba el contrato definitivo mediante procedimiento abierto considerando que es necesaria una adecuada planificación de las necesidades y que no se admite esta justificación ya que los organismos deben saber cuándo caducan los contratos y establecer los trámites para sacarlos nuevos a tiempo.

Inicio de los trabajos en 2019

Los trabajos para el nuevo contrato de basura comenzaron a realizarse en 2019 con el gobierno PP-Cs. Se sometió a comisión de grandes contratos y se aprobó la memoria optando la ciudad por mantener la gestión indirecta frente a la remunicipalización, lo que llevó incluso a la denuncia judicial de Unidas Podemos. Según defendió la anterior concejal de Medio Ambiente del PP, Pepa Rubia, en noviembre de 2021, se había dejado todo preparado acusando al gobierno del PSOE de retrasar los trámites. Según defendió, el pliego técnico elaborado por el área de Medio Ambiente se envío en julio de 2021 a contratación para que tras su unión con el pliego administrativo pudiera licitarse. "Sin embargo, y sorprendentemente, cinco meses después, el equipo de gobierno no solo no sacó a licitación el contrato sino que lo calificó de borrador", cuando es "un documento con 160 páginas, 60 anexos que suman un total de más de 1.200 páginas y 14 hojas de cálculo", dijo Rubia, que cuestionaba que el expediente se hubiera devuelto a Medio Ambiente para hacer cambios.

El actual gobierno del PSOE defiende que retomó la gestión del expediente a su llegada al gobierno pero entre el aterrizaje por el cambio de Alcaldía en junio y el verano, se avanzó poco. La idea inicial era que para final de enero estuvieran los pliegos técnicos y después se pasara a los administrativos, confiando en que en el segundo trimestre de 2022 se pueda abrir el concurso e iniciar el proceso de licitación de un contrato que supone unos 40 millones de euros. La última fecha dada era mediados de febrero, pero llegamos a marzo y siguen sin salir los pliegos. 

Los pliegos, según el informe de Intervención, llevan una revisión de las cláusulas que podría minorar el precio del contrato en 2,1 millones de euros "sin menoscabo en la viabilidad económica de la concesión". Además, con la finalización del contrato se eliminan otros 2,1 millones de coste de linealización. A su vez, la segunda modificación del plan de ajuste incluía una nueva disminución de los gastos en limpieza de 3 millones (500.000 en 2020 y 2,5 en 2021), por lo que "el total ahorro por la adjudicación del nuevo contrato del servicio de limpieza sería de 6.753.710 euros".