El horizonte no permite ver, precisamente, cielos claros. De nuevo la incertidumbre sobre el modelo de financiación se cuela en el diseño de los presupuestos de la Universidad de Granada (UGR) para el próximo año, un 2018 en los que la "austeridad" será, de nuevo, un argumento de peso en la gestión de los fondos de la institución. Las cuentas anuales, que ayer pasaron por consejo de gobierno, prevén un aumento tanto en los ingresos como el los gastos en la misma proporción (3,67%) con respecto al ejercicio que está a punto de finalizar. En total, se prevé que la institución maneje a lo largo de los próximos doce meses 405,2 millones de euros. La mayor parte procederá de las administraciones públicas. La Junta asumirá la mayor parte (86,9% del total que se ingresará de fuentes públicas), mientras que el Estado correrá con un 10%. Se prevé que otro 2,3% provenga de la Unión Europea y el resto de financiación de las administraciones provenga de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla.

En cuanto a los gastos, las mayor partida se la lleva personal, con 279,9 millones, un 3,9% más que lo presupuestado para este 2017. Esta cantidad, sumada con los fondos destinados al Plan Propio de Investigación, 3,8 millones, más la cuantía prevista para el Plan Propio de Becas (otros 2,7 millones, la misma cuantía que en 2017), suponen que el 70,7% del dinero que gestionará la UGR el próximo año irá para estas tres partidas.

La redacción del documento con las cuentas para 2018 incide en la "necesidad de ser prudentes" tanto con las estimaciones de ingresos como en la previsión de gastos. Asimismo, reconoce que los esfuerzos se centran en la "viabilidad y sostenibilidad económico financiera" de la institución académica. Sobre los números pesa la incertidumbre del nuevo modelo de financiación por parte de la Junta de Andalucía -principal sostén financiero de las universidades públicas andaluzas-, que, tal y como se reconoce en el documento que ayer pasó por consejo de gobierno, "aún no ha tenido una aprobación ni concreción definitiva". El pasado miércoles, en la sesión ordinaria del claustro, la rectora, Pilar Aranda, expresó su deseo de que el incremento presupuestario que la Junta prevé en la financiación de las universidades andaluzas no tenga como destino la financiación de las bonificaciones de los precios públicos, medida estrella de la Junta para este curso y que, en el caso de la UGR ha supuesto unos 8 millones de euros. Otro foco de incertidumbre está en Madrid. El Gobierno tampoco cuenta con presupuestos generales para el próximo ejercicio. Ante esta situación, la UGR se atiene al principio de "máxima prudencia" en sus cuentas.

Pese a esta falta de certeza -aunque se indica que se prevé una "continuidad" en la financiación que procede de las administraciones públicas-, la UGR se marca en las cuentas del próximo año dos "objetivos estratégicos", el mantenimiento y "hasta donde sea posible" la creación de empleo, con mención especial, dentro de las medidas para paliar los efectos de la crisis, a la situación de la lista de espera de acreditados a titular y catedrático, que podría absorberse en un plazo de dos años, según la rectora. Otras medidas que se prevén para el personal docente y de administración y servicios es el "impulso" al efecto redistributivo de los programas de acción social, mientras que para los estudiantes se continuarán con las ayudas extraordinarias y el Plan Propio de Becas, además de medidas de apoyo a la creación de empresas, plazas bonificadas en residencias y colegios mayores y el programa de préstamo de matrícula.

En cuanto al capítulo de infraestructuras, se prevén una inversión de 22,8 millones de euros tanto "de nueva creación como de reposición". Otros 951.700 euros irán a la reparación, conservación y mantenimiento de las infraestructuras de la UGR.

En cuanto al Vicerrectorado de Internacionalización, se destinarán 5,4 millones a programas de movilidad saliente tanto de estudiantes como de personal docente e investigador como de administración y servicios. Por otro lado, el Vicerrectorado de Extensión Universitaria destinará 365.000 euros a actividades culturales y 75.000 al diseño de un "gran espacio cultural y museográfico", entre otras partidas. En el área de Responsabilidad Social, a comedores -la "joya de la corona", en palabras de Pilar Aranda- se destinarán 1,7 millones, mientras que Acción Social y Solidaria gestionará otros 2,4. En cuanto ala Delegación de la Rectora para la Universidad Digital, la mayor cuantía, 1,7 millones, irá destinada a la actualización de la infraestructura TIC, mientras que otros 315.900 se invertirán en el mantenimiento del portal PRADO y en la formación del profesorado en el uso "tecnológico y pedagógico" de plataformas, entre otras partidas.