El PP de Granada ha ganado las elecciones con solvencia en Granada capital y el mapa con el análisis censal de los resultados calle por calle lo atestigua. Cuando hace años, la capital se dibujaba en dos colores, rojo y azul, con barrios fieles a cada partido, en esta ocasión sólo algunos reductos en tres zonas de la capital han dado la victoria al PSOE, que sólo se impone con claridad en zona Norte. El resto, azul PP, lo que traslada calle por calle el hecho de que los populares hayan conseguido el 46,7% de los votos de la capital frente al 19,8% del PSOE.

El resto de partidos no han sido primera fuerza en ninguna sección censal de la capital.

Y resulta curioso ver cómo por ejemplo el Albaicín y el Realejo han dado la mayoría al PP, juntándose a barrios tradicionales de derechas como el Centro, Ronda, Beiro o Genil. Otros graneros tradicionalmente socialista como Zaidín o Chana, también han votado mayoritariamente a los populares.

El PSOE sólo ha podido ser primera fuerza en tres zonas de la capital: Santa Adela, una parte de La Chana y zona Norte, la única que consigue retener.

Por barrios

En el caso del Zaidín, el mapa muestra un barrio que se ha teñido de azul cuando era un feudo socialista histórico al ser barrio obrero. Ahora, el PSOE sólo ha conseguido ser primera fuerza en la zona de Santa Adela y en las casillas Bajas, a uno y otro lado de la Avenida de Dílar. Así, ha ganado por ejemplo en la calle Santa Adela, Jarama, Chipre, Belchite, San Lorenzo, Garellano, Simancas, Cataluña y una parte de Poeta Gracián y de Asturias. También la zona de la Avenida de Dílar que une Santa Adela con las casillas Bajas y después ha bajado para ganar en Bolivia, Colombia, Duero, Chile, Perú, la Plaza de las Palomas, Honduras, Galicia, Bailén o Flandes.

En la Chana, otro barrio socialista por antonomasia en la capital, la victoria se ha podido mantener sólo en un puñado de calles: Sagrada Familia, Virgen del Monte, Virgen de la Paloma, Echegaray, Gras y Granollers, Carretera de Málaga o Rubén Darío.

La tercera zona teñida de rojo en este mapa electoral de las autonómicas está en la zona Norte. Este es el feudo socialista más amplio que queda en la capital ya que el rojo se extiende por Carretera de Murcia, Camino de Víznar, sube por Pedro Machuca, Sánchez Cotán, Diego de Arana, Camino de Alfacar, Calle Mayor, Víctor Hugo, Luz Casanova, Pedro Machuca, Casería del Cerro, Casería de Aguirre, Maimones, Caña, Vito, Zambra, Casería de Aguirre, Juan Pablo II, Merced Alta, ciclovía Granada-Peligros, Mozart, San Juan y toda la parte que linda con Pulianas.

En cuanto al resto de distritos, en todos se ha impuesto el Partido Popular.

Para las municipales

Aunque no se quieren extrapolar resultados de generales o autonómicas a municipales ya que el voto es distinto a la hora de elegir a tu alcalde y ser más cercano, la tendencia a la derechización del voto en Granada es clara. El reto en el año que queda para las municipales es saber aprovechar estos resultados en el caso del PP local y revertirlos en el del PSOE y la izquierda.

Los populares tendrán que aprovechar ese efecto Moreno Bonilla y la victoria en la Junta para trasladarlo a la política local. En estas elecciones no ha tenido repercusión el lío municipal de hace un año con la salida del grupo municipal del gobierno de la ciudad por su ruptura con Cs y la recuperación de la Alcaldía para el PSOE, lo que tampoco han aprovechado los socialistas. El candidato elegido será clave para el PP, partido en el que suenan varios nombres y que tendrá que elegir bien para aprovechar la ola azul, más cuando en estas andaluzas se ha visto la importancia de un candidato adecuado.

Vox tendrá el reto de ver si ha tocado ya techo ya que con su candidata estrella, Macarena Olona, se han quedado muy lejos de sus pretensiones en la Junta y en la ciudad sólo ha subido dos puntos. Con la marcha del portavoz Onofre Miralles al Congreso para sustituir a Olona desde julio (si finalmente se produce), el relevo tendrá que tener también una visión electoral para este último año de mandato municipal. Y el grupo municipal Unidas Podemos tiene también un año para que su trabajo pase por encima de los problemas internos de las confluencias y los partidos a la izquierda del PSOE a nivel autonómico y nacional y conseguir un proyecto claro para el votante.

Evolución del voto en los barrios de Granada

En las elecciones municipales de 2019, que le dieron una mayoría simple a los socialistas en la ciudad (insuficiente para formar gobierno), el PSOE ganó en los barrios del Albaicín, Chana, Norte y Zaidín. El PP se impuso en Ronda, Genil, Beiro y Centro.

Cinco meses después de aquellos comicios, en la repetición de las elecciones generales del 10 de noviembre, los socialistas volvieron a ganar en Albaicín, Chana, Norte y Zaidín, mientras que los populares sacaron músculo en Ronda y también en Genil, Beiro y Centro. Vox , por su parte, consiguió sus mejores resultados en Genil y pese a no ganar en ningún distrito de la capital, sí fue la segunda fuerza más votada en muchos barrios y en algunas mesas electorales de la zona Norte se llegó a imponer al resto de partidos con sus cuestionados mensajes sobre la inmigración. Duplicó sus resultados respecto a las municipales. Ciudadanos ya comenzó su declive al pasar de ser la segunda fuerza más votada en Chana, Ronda, Norte y Centro (en las municipales de unos meses antes), pasó a sólo superar los 2.000 sufragios en Ronda.

Por tanto, aunque unas elecciones no son extrapolables a otras, aquellos datos ya demostraban que la tendencia se sostiene, pese a ser comicios muy diferentes. Ahora, tres años después, tras una larga pausa electoral, se produce un cambio de tendencia de voto muy radical en la ciudad de Granada (que tiene su reflejo también en la provincia). 

En estas autonómicas del 19J, el PP recuperaría Albaicín, Chana y Zaidín y sólo Norte podría estar en manos del PSOE, que ha sido mayoritario en pequeñas zonas y calles de sus antiguos caladeros de voto. Ningún otro partido logra imponerse y ser el más votado en las calles y distritos de Granada, pero la fuerza de Vox sigue presente, al ser la segunda fuerza más votada detrás del PP en muchas zonas céntricas de la ciudad y concentrar el 14% del voto global, cinco puntos más que en las municipales (9,4%), pero otros cinco puntos por debajo de lo que consiguió en las generales del 10N (19%). El freno a sus perspectivas de crecimiento es evidente también en la ciudad, porque tras aquel resultado de las nacionales el partido de Abascal miraba a Granada como un posible objetivo de cara a la obtención de la Alcaldía.  

Todo esto forma parte de un análisis que sin duda está encima de la mesa de los partidos de cara a las municipales de dentro de un año para trabajar.