La Audiencia decreta investigar a Juana Rivas por un posible delito de sustracción de menores y Gabriel Arcuri se querella contra su padre

La 'guerra' judicial en entorno familiar Arcuri-Rivas continúa con un cruce de acusaciones. Por un lado, la Audiencia de Granada ha admitido de forma parcial el recurso presentado por Francesco Arcuri contra el archivo de la denuncia que interpuso contra Juana Rivas por un delito de sustracción de menores, y por otro, Gabriel Arcuri, el hijo mayor de la expareja, se ha querellado contra su padre por atentar contra la integridad moral y coacciones cometidos contra Daniel, su hermano menor.

La Sección Segunda de la Audiencia de Granada ha emitido un auto este jueves ha admitido parcialmente el recurso presentado por Francesco Arcuri contra la decisión del Juzgado de Instrucción número 4 de Granada, en un auto con fecha del 9 de mayo, de archivar la denuncia en la que Arcuri acusó a Juana Rivas de un delito de sustracción de menores y ha acordado investigarla por no haber facilitado que el menor de sus hijos vuelva a Italia. En su resolución, el tribunal ordena literalmente "practicar diligencias de investigación" en los términos que expone el propio auto de la Audiencia.

Por lo tanto, la Audiencia acuerda investigar el delito de sustracción de menores al entender que Juana Rivas está incumpliendo la orden dictada por un tribunal italiano el pasado febrero de que su hijo menor, de 11 años, vuelva con su padre, que tiene la custodia.

En cambio, no ha admitido el recurso en lo referido a un delito de maltrato al interpretar que si el menor ha sufrido daño psicológico, no ha sido provocado de manera intencionada por la madre.

Querella

Por su parte, Gabriel Arcuri, el hijo mayor de Juana Rivas, ha formalizado una querella contra su padre, Francesco Arcuri, por atentado contra la integridad moral y coacciones cometidos contra Daniel, el otro hijo de la expareja, y ha pedido medidas cautelares para evitar que ejerza la custodia. En la querella presentada ante el juzgado en funciones de guardia, , Gabriel, de 19 años, acusa de estos dos delitos a su padre y la psicóloga que lo acompañó el pasado martes al punto de encuentro familiar en el que el menor tenía que pasar por orden judicial de la madre al padre.

El mayor de Juana Rivas actúa contra su padre, al que acusa de instar a la psicóloga a comparecer en el punto de encuentro familiar para presionar al menor y "doblegar su voluntad" con el objetivo de que Daniel accediera a marcharse a Italia con Arcuri. El escrito de la querella asegura que, en las cerca de tres horas que los dos hermanos estuvieron en el punto de encuentro, se incumplieron las normas deontológicas y los protocolos y se sometió al menor a un "durísimo interrogatorio" que le generó "ansiedad y desasosiego".

Añade que Gabriel grabó con su teléfono móvil esas más de dos horas y media en las que su hermano sufrió una "inaceptable tortura psicológica" e interpreta la conducta de la psicóloga como una presión sobre el menor que le ocasionó una "crisis aguda de ansiedad". Según el equipo jurídico del joven, estos hechos constituyen un delito de coacciones y otro de atentado a la integridad moral, una intimidación para "influir a un menor".

La querella considera además que se trata de un delito de coacciones consumado y solicita que se tome declaración a Arcuri y a la psicóloga querellada y se proceda a volcar la grabación de todos estos hechos que se contienen en el teléfono personal del querellante para que sirvan de prueba.

La querella añade la petición de medidas cautelares, incluida una orden de protección del menor, que su padre no pueda comunicarse con él ni estar a menos de 200 metros de Daniel y que se deje sin efecto la orden de entrega del niño con Arcuri, que tiene su custodia, por el "gravísimo padecimiento psicológico" de las presiones.