Otra china en el zapato de Pérez

La dirección provincial del PP resta importancia a la candidatura alternativa del alcalde de Molvízar y hasta pone en duda que llegue a presentarse al Congreso

Sebastián Pérez, en primer término, con Santiago Pérez, diputado autonómico y hombre de su confianza.
Guillermo Ortega / Granada

14 de octubre 2008 - 01:00

La frase se la atribuyen a un destacado militante con cargo orgánico, de los de peso específico dentro del partido: "Para él, ése no es ni una china en el zapato". Demasiado coloquial para que la entienda el no iniciado, pero si se sustituye 'él' por Sebastián Pérez, 'ése' por Fermín García Puentedura y se sitúa todo en el contexto del Congreso Provincial que está a la vuelta de la esquina, empieza a tener sentido.

Fermín García es el alcalde de Molvízar y la persona que se propone encabezar una lista alternativa a la dirección provincial del PP para el congreso del 22 de noviembre. Asegura tener 95 firmas que le avalan -veinte más de las que, según sostiene, exigen como mínimo los estatutos del partido- y el apoyo de regidores de varias zonas de la provincia. Habla de la necesidad de hacer del PP una formación "más democrática y participativa" y propone a Pérez un "debate público" para hablar de ese asunto y también de otros, como la duplicidad de cargos de algunos dirigentes.

Eso último pretende ser un disparo en la línea de flotación del líder provincial, que aparte de eso es concejal, senador y vocal en la ejecutiva nacional. Pero si quería que con eso saliera a la palestra, ha fallado. Al menos oficialmente, la respuesta de Sebastián Pérez es el archiconocido 'no comment'.

La intención es ignorarle hasta que no sea formalmente candidato, para lo que tiene que conseguir el apoyo del veinte por ciento de los compromisarios y no los tiene garantizados por la simple razón de que los compromisarios -salvo los natos, claro- ni siquiera han sido aún elegidos.

Está claro que Pérez sí tendrá de sobra esos avales, pero... ¿los logrará Fermín García? Fuentes del partido lo ponen en duda, entre otras cosas porque, después de sofocar la revuelta que se formó en su casa tras las elecciones, liderada por el alcalde de Otura, Ignacio Fernández y el ex regidor de Granada Díaz Berbel, Perez tiene todo el control.

En esa suerte de conjura, dicen, había bastante más gente y con bastante más nombre en el PP granadino. Sebastián Pérez, pese a todo, devolvió las aguas a su cauce con una tranquilidad asombrosa. Comparado con eso, agregan, lo de Fermín García no es ni un conato de incendio.

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