Convocan una nueva movilización por la restauración de la Parroquia de Alhama de Granada, en riesgo de derrumbe desde 2018

Tendrá lugar el 6 de abril, junto a la Catedral de Granada capital, y contará con una actuación musical y un acto simbólico final abrazando la edificación

Ni la Catedral ni la Alhambra, la "olvidada joya arquitectónica" de Granada que hay que visitar según Arquitectura y Diseño

Imagen de archivo de la Parroquia de Alhama
Imagen de archivo de la Parroquia de Alhama / Ayuntamiento de Alhama
Daniel Valle

04 de abril 2025 - 10:45

Granada/La asociación de vecinos Marchando por Alhama ha convocado una movilización por el arreglo y apertura de la iglesia de Nuestra Señora de la Encarnación de la localidad para el próximo domingo 6 de abril, a las 12:00 horas, en Granada capital, en la Plaza de Alonso Cano. Se realizará un acto musical protagonizado por la comparsa infantil Los Gorriones, que interpretarán una canción compuesta para los carnavales de la localidad en la que visualizan la situación que sufre la parroquia, y se realizará un acto simbólico abrazando la Catedral al concluir el recorrido.

Desde la plataforma han publicado un llamamiento a la participación, alegando que "si hoy dejamos que caiga y siga cerrado ante el silencio de todos, si hoy nos quedamos en casa cómodos, no solo perderemos un monumento: perderemos nuestra identidad". De igual manera, reivindican que "el patrimonio que nos dejaron debe ser cuidado y respetado; traicionar ese legado sería permitir que la indiferencia nos arrebate lo que nos pertenece".

Se contará con un autobús financiado por el Ayuntamiento de la localidad y es necesaria la inscripción previa para una mejor organización. Podrá realizarse a través del punto de información del consistorio, la clínica dental César Pérez, la Óptica Cristina y el teléfono móvil de la plataforma, publicado en sus redes sociales.

Cartel de la convocatoria para la manifestación
Cartel de la convocatoria para la manifestación / Marchando por Alhama

No es la primera vez que la localidad se moviliza por su monumento. En marzo de 2023, más de 300 personas marcharon por las calles principales de la localidad hasta la Plaza de los Presos, al pie de la torre de la Iglesia de la Encarnación. En abril del año pasado, los centros educativos alhameños organizaron un círculo humano abrazando la Parroquia y tuvo lugar una segunda manifestación. Esta vez, llevan su lucha hasta la capital, buscando que el eco de la ciudad consiga intensificar el impacto de su reivindicación.

La parroquia, una de las joyas artísticas del Poniente y única de estilo gótico de la provincia, fue reconocida como Bien de Interés Cultural, bajo la categoría de monumento, desde 1931. De una sola nave y con fábrica de sillería, presenta la majestuosidad de una Iglesia Mayor. Su torre, edificada sobre la capilla principal, tiene 35 metros de altura, de tal modo que se ha erigido en todo un referente paisajístico y arquitectónico de su entorno. Construida sobre los cimientos de la antigua mezquita aljama, en las intervenciones arquitectónicas de época posteriores participaron arquitectos como Bernardo Ximénez, Enrique Egeas, Rodrigo Hernández, Diego de Siloé y Juan de Maedas. A lo largo de su historia, el templo ha ido incorporando a su fábrica elementos renacentistas, barrocos, neoclásicos e, incluso, contemporáneos. El gran terremoto de 1884, con epicentro en la localidad cercana de Arenas del Rey, afectó gravemente a su integridad.

Cronología de siete años de espera

En el año 2006, la Junta de Andalucía realizó unas obras de restauración del monumento declarado Bien de Interés Cultural, financiadas con fondos FEDER. Ocho años después, en 2014, se detectaron problemas con la estructura derivados de deficiencias en dicho proyecto, donde, según denuncian los organizadores de la manifestación, no hubieron reclamaciones a la empresa responsable. Debido al riesgo de derrumbe tras el hundimiento parcial de su cubierta, la Parroquia cierra sus puertas en el año 2018.

Debido a esto, la Asociación de Vecinos de la localidad comienza a movilizarse buscando una solución, entrando en una vorágine de gestiones en las que participan la Junta de Andalucía, el Arzobispado, el Ayuntamiento de Alhama y el Defensor del Pueblo. El reloj corre y no se elabora ningún proyecto de rehabilitación, y la ausencia de explicaciones por parte de las instituciones competentes se intercala con respuestas ambiguas a los requerimientos ciudadanos, generando una sensación de falta de transparencia ante el problema.

En el año 2021 vuelve a haber riesgo de derrumbe por problemas con sus cubiertas, por lo que se realizan unas obras de emergencia para garantizar su integridad estructural para las que se destinan más de 148.000 euros. Sin embargo, esta actuación resulta ser poco más que un parche, y según los manifestantes, "se dispusieron andamios y poco más".

En julio de 2022 se envían 1.300 firmas al Defensor del Pueblo para intentar reactivar la situación y, ante la continuidad de la actitud pasiva desde las instituciones, en marzo de 2023 tiene lugar la primera manifestación masiva de los vecinos exigiendo soluciones, seguida de una segunda el año siguiente, donde también se realizó un círculo humano abrazando la Parroquia por parte de los centros educativos de Alhama.

Imagen de la primera manifestación por la restauración de la Parroquia, en marzo de 2023
Imagen de la primera manifestación por la restauración de la Parroquia, en marzo de 2023 / Ayuntamiento de Alhama

Estas proclamas consiguen reactivar la situación, generando 7 meses después de la última protesta, en noviembre de 2024, una reunión en Alhama entre el Obispo, la Consejera de la Junta de Andalucía y el Alcalde de la localidad, firmando un convenio en el que se establece que se estudiarán nuevas soluciones y la redacción de un protocolo que rige y dirige el proceso de restauración del monumento, con fecha límite en febrero de 2025. Sin embargo, a día de hoy, las obras siguen sin empezar, los vecinos no cuentan con ningún tipo de información clara y las puertas de la iglesia de Nuestra Señora de la Encarnación continúan cerradas, mientras que el reloj sigue corriendo y el riesgo de derrumbe se mantiene presente.

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