La defensa de Juana Rivas vuelve a recurrir la sentencia que concede la custodia del hijo menor a Arcuri

Granada/Aránguez Abogados, el despacho que ejerce la defensa de Juana Rivas en España, ha interpuesto un recurso de casación ante la Corte Suprema italiana contra la sentencia dictada por la Corte de Apelación de Cagliari (el equivalente italiano a una audiencia provincial), el pasado febrero en la que concedía la custodia de Daniel, hijo menor de la granadina a su padre, Francesco Arcuri, según ha dado a conocer el propio bufete, indicando también que "por coherencia" a su recurso se ha adherido Fiscalía General de Cagliari.

La defensa de la granadina considera inaceptable que se conceda la custodia del benjamín a Arcuri, "imputado por maltratarle, física y psicológicamente, de forma habitual" y cita la decisión tomada por el Juzgado de Instrucción n.º 4 de Granada, a principios del pasado año, cuando estableció una medida cautelar de protección al favor de Daniel, "dando cumplimiento a la normativa interna y europea que exige priorizar, por encima de cualquier otro interés, el interés superior del menor", explican desde el despacho.

Tras esto, Arcuri presentó en Italia una denuncia contra Juana Rivas, a la que acusó de un delito de sustracción de menores por frenar la vuelta del hijo menor de ambos tras las vacaciones de Navidad, el mismo delito por el que esta vecina de Maracena ya fue juzgada, condenada y parcialmente indultada.

Por su parte, en marzo de 2024, la Corte Suprema italiana anuló la sentencia de la Corte de Apelación de Cagliari que otorgaba la custodia exclusiva de Daniel a su padre, evidenciando "las graves irregularidades del proceso llevado a cabo en Cagliari", entre otras la ausencia de valoración adecuada de ese “interés superior" de los dos hijos los dos hijos de la pareja (Gabriel, el hermano mayor, vive en Granada con Rivas desde hace varios años).

La Corta Suprema italiana detalla el bufete, es un tribunal que ejercita una función de control de legitimidad, de ahí que, una vez anulada la sentencia impugnada, correspondiera nuevamente a la Corte de Apelación de Cagliari pronunciarse en relación con la custodia, aunque esta vez "con magistrados distintos a los anteriores, y siguiendo las directrices marcadas por el alto Tribunal".

Sin embargo, casi un año después, este órgano concedió la custodia al padre, ignorando la existencia de la acusación penal formalizada por la Fiscalía General de Cagliari contra Arcuri por maltrato a sus hijos, delitos para los que el Código Penal italiano establece pena de prisión de hasta siete años de cárcel, explican desde Aránguez Abogados.