El Defensor del Pueblo pide al Ayuntamiento de Salobreña que redistribuya los contenedores de la basura

Recorrer prácticamente a diario más de dos kilómetros con la bolsa de basura para dejarla en el contenedor se antoja un esfuerzo importante. Es lo que motivó a un vecino de Salobreña a remover cielo y tierra para dar solución a su problema. Su residencia está lejos, muy lejos, del contenedor más próximo, a unos dos kilómetros. Ante esto, el pasado 23 de enero solicitó al Ayuntamiento de la Villa darse de baja del impuesto que hay que pagar por la recogida de residuos y además llevó su caso al Defensor del Pueblo.

La oficina de Ángel Gabilondo está a la espera de respuesta por parte del Ayuntamiento a la recomendación hecha por la Defensoría. Se pide "asegurar un adecuado reparto de los contenedores en el municipio", a fin de que se garantice que "todos los ciudadanos puedan depositar los residuos en ellos sin necesidad de utilizar un vehículo". Se insta además a que el Ayuntamiento comunique "a la mayor brevedad" si acepta o no la petición.

El vecino indicaba en su queja al Defensor que su casa está sujeta al pago de la tasa de residuos urbanos, pero el contenedor más cercano está a unos dos kilómetros. Pidió darse de baja sin recibir respuesta. Tras la intervención de la oficina de Ángel Gabilondo, el Ayuntamiento conestó que la petición de este vecino se había desestimado.

El Consistorio arguyó que que la distancia entre casa y contenedor no significa que no se preste el servicio. Además, se aplica una tarifa reducida a quienes viven en suelo rústico con respecto a quienes residen en el casco urbano.

Ante estos argumentos, la Defensoría señala la diversa normativa que existe al respecto. Alega en este punto que "la jurisprudencia ha considerado que una distancia superior a 300 metros" entre el domicilio y el contendor "no permite justificar" que el servicio llegue a prestarse.

Tras recordar este punto y señalar de nuevo la medida del Ayuntamiento de rebajar el coste del servicio para quienes vivan en suelo rústico, Gabilondo se pronuncia en favor del ciudadano. Señala así que "una distancia de aproximadamente dos kilómetros entre una vivienda y el contenedor más cercano debe reputarse excesiva, pues supone un esfuerzo desproporcionado para el ciudadano, que debe desplazarse por sus propios medios y con la necesidad de utilizar un vehículo".

Por ello, desde la oficina del Defensor se pide al Ayuntamiento que redistribuya los contenedores, una petición que se presenta como recomendación y que fue formulada el pasado mes de julio.

Hace unos días el PP reclamó al alcalde de la Villa, Javier Ortega, que devolviera la tasa cobrada tras el pronunciamiento del Defensor.