A tenor de los últimos acontecimientos, el grupo popular está más cerca de abandonar la bancada del equipo de gobierno. La ratificación de Ciudadanos y Vamos Granada en apoyo a la candidatura del socialista Paco Cuenca deja prácticamente sin opciones a la alcaldable Rocío Díaz (PP). Aunque parecen reducirse las opciones cada hora que pasa hasta el último momento puede pasar de todo. Es algo por lo que está trabajando la dirección nacional del PP en la sede de Génova. El nombre de la ciudad está en rojo en los despachos de los máximos responsables del partido a la expectativa de ver qué ocurre.

Dentro del difícil panorama que se vislumbra los populares tienen una esperanza. Se da el caso de que anteayer Ciudadanos anunció la expulsión de sus cinco concejales en el Ayuntamiento de Molina de Segura (Murcia) por incumplir la disciplina del partido. Según argumentó la formación, estos ediles no mantuvieron las directrices marcadas por el partido y debido a ello se les abrió un expediente disciplinario que acabó con su salida.

El pasado 29 de marzo, y tras la dimisión del alcalde, Eduardo Contreras (PP), que gobernaba gracias a que C's no votó en contra de su investidura, el partido naranja votó a favor de que la primera edil fuera la socialista Esther Clavero, cuya formación había obtenido 6 ediles. Clavero logró el bastón de mando también con el apoyo de los cuatro de Cambiemos-Podemos y el de Ganar-IU-UP, lo que le daba la mayoría absoluta frente a los nueve del PP.

A raíz de esta decisión, C's aseguró que con esta medida marca "una nueva forma de hacer política, y por ello se actúa en el cumplimiento de los estatutos, normativa interna del partido y el respeto a unos principios éticos que garantizan la responsabilidad y el compromiso adquirido con la ciudadanía". Salvando los matices y letra pequeña entre un caso y otro, el PP mantiene el anhelo de seguir al frente del Ayuntamiento de Granada.