El encarecimiento del ocio y el transporte veraniego marcan los precios durante julio en Granada

El Índice de Precios al Consumo (IPC) durante el mes de julio en Granada marcó la primera 'bajada', si se puede llamar así (un 0,1%), del coste de la vida en la provincia durante este año. Más bien podría llamarse estancamiento en un índice que no ha dejado de subir y que está en picos máximos de los últimos 12 meses. Al abaratamiento ligero en general en todos los productos, destacan por contra las subidas en todo lo relacionado con las actividades relacionadas con el periodo veraniego y vacacional. De hecho, los rubros en los que más han repuntado los precios son los transportes (2%), y el ocio y la cultura, que suben un 1,2% en el último mes. También ha subido un 0,5% el gasto en vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles, que ha sido uno de los índices que más han crecido a nivel nacional. Por el contrario, el mayor descenso de los precios en Granada lo ha protagonizado el vestido y el calzado, un 8,4% menos que en junio, coincidiendo con la época de rebajas. También destaca el 1,8% de descenso en las comunicaciones.

Por subgrupos, en Granada, el mayor aumento del precio de las cosas durante el pasado mes de julio se lo llevaron los servicios de transporte, con un incremento del 12,9%, seguido de los paquetes turísticos, un 8,5% más que en el junio. También crecieron aunque de forma más moderada las bebidas no alcohólicas, apenas un 1,4% y la utilización de vehículos personales (1%), y la electricidad, gas y combustibles (0,9%). En lo demás, las bajadas son poco pronunciadas, acentuando así el ligero descenso del índice general. La mayor, la de los vestidos, un 9,4% menos que el mes anterior, junto al 4,8% del calzado. Los equipos de telefonía descienden un 2,7%. Los alimentos bajaron sus precios apenas un 0,8%.

Eso sí, con respecto a hace un año, la vida se ha encarecido un 2,9% en la provincia de Granada. Si ya los precios estaban altos, la percepción de que no dejan de crecer, sobre todo los de productos de primera necesidad, es cierta. En relación a los índices de precios de julio de 2024, este año crecen en todos los parámetros y solo baja en uno, el ocio y la cultura, un 0,6% más barato que hace un año. Apenas nada. En este orden, los precios subieron con respecto al mismo mes del año pasado la vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles, un 7,1%, seguido de las bebidas alcohólicas y tabaco (5,4%), restaurantes y hoteles (4,4%), y los alimentos (3,2%). El resto de parámetros subieron un 2,3% en otros bienes y servicios, sanidad (2%), enseñanza (1,9%), transporte y vestido y calzado (1,8%), muebles y artículos del hogar (1,3%), y las comunicaciones (0,8%).

UGT

Luis Miguel Gutiérrez, secretario general de UGT Granada ha señalado el "efecto de las rebajas de julio en los bolsillos de las familias granadinas se ha visto atenuado por el encarecimiento de productos energéticos como la electricidad y los carburantes". En cuanto a la negociación colectiva, el secretario general ha afirmado que "sigue respondiendo con firmeza mediante incrementos salariales en convenio", como señalan os últimos convenios firmados en la provincia de Granada (limpieza o transporte de viajeros). Sin embargo, ha recalcado que estos aumentos son "insuficientes y estériles ante un mercado inmobiliario desbocado y profundamente especulativo".

Gutiérrez ha querido destacar que "los precios de la vivienda muestran una evolución completamente desligada del comportamiento de la economía real y la renta de los hogares", proyectando unos precios "prohibitivos para la mayoría de las personas trabajadoras". Por ello, ha puesto de relieve la "profunda brecha existente entre los salarios y el precio de la vivienda". Desde el sindicato, más allá de reclamar una aplicación y mejora efectiva de la legislación que regula el mercado de la vivienda, exigen que el precio de la vivienda se incluya como "un indicador estructural en la negociación colectiva".

El secretario general de UGT Granada también ha manifestado su preocupación por el acuerdo comercial entre la administración Trump y la Comisión Europea, que impone unos aranceles del 15% a las exportaciones europeas sin contrapartidas exigibles a Estados Unidos. Gutiérrez ha señalado que habrá que "estar pendiente de la evolución de precios y de la actividad económica y el empleo de algunos sectores e industrias exportadoras de nuestra provincia como el agroalimentario, con especial atención al aceite de oliva y al vino, entre otros". En consecuencia, el sindicalista considera "necesario desplegar una política preventiva y solidaria que responda con eficacia a la magnitud de dicho incremento impositivo, protegiendo y compensando los desajustes generados en términos de competitividad y empleo".